Bahía quiere resucitar
Hay tres propuestas para reactivar la economía de la ciudad manabita Una de las iniciativas plantea delimitar una Zona Especial de Desarrollo Económico
Resurgir es la premisa. Reactivar la economía, el objetivo. Bahía de Caráquez quiere resucitar entre los escombros que dejó el terremoto del 16 abril. Más de cien días después del desastre surgen propuestas de diferentes frentes para reanimar la casi moribunda actividad comercial también devastada por el sismo.
Una de las iniciativas viene de la Fundación Bahía 2000 junto con la sociedad civil. La idea es crear una Zona Especial de Desarrollo Económico (ZEDE) dentro de la ciudad.
La propuesta está enmarcada en el Código Orgánico de la Producción, Comercio e Inversiones, en cuyo artículo 34 establece que el Gobierno podrá autorizar la creación de estas zonas, como un destino aduanero, para que se asienten nuevas inversiones.
La creación de la ZEDE podrá solicitarse por parte interesada, a iniciativa de instituciones del sector público o de gobiernos autónomos descentralizados, en este caso el del cantón Sucre, provincia de Manabí. Su alcalde, Manuel Gilces, cree que es importante la creación de una zona de desarrollo, pero prefiere esperar el análisis de un diagnóstico levantado por la Universidad Central de Quito.
Este documento es la segundo iniciativa que pretende dar las herramientas para enfocar y zonificar lo que realmente necesita Bahía, precisa Gilces. El texto ya está en manos del alcalde, quien espera hermanar a las universidades Central de Quito y de Cuenca para tener una mayor capacidad técnica que per- mita ejecutar el diagnóstico.
Un grupo de la Fundación y de la sociedad civil bahieña se reunió con el procurador síndico del Municipio de Sucre, Jorge Garay, quien les pidió que redacten la iniciativa para presen- tarla al primer edil. Además, recomendó que el documento no solo incluya a Bahía, sino a todo el cantón. No obstante, los ciudadanos consideran que la capital cantonal es la más deprimida y golpeada por el terremoto, tal como lo contó EXPRESO en su edición de ayer.
La última iniciativa viene de la Cámara de Comercio de Sucre. Su presidenta, July Hidalgo, planteó al Municipio construir un centro comercial con locales a bajo costo y con un patio de comidas. Según la dirigenta gremial, no existen locales comerciales disponibles en la ciudad.
Cien negocios, de los 150 afiliados a la Cámara hasta antes del terremoto, fueron afectados parcial o totalmente. De ellos, 100 días después del sismo, el 50 % está activado, unos en Bahía, otros en Leonidas Plaza (parroquia de Bahía) y otros en San Vicente (otro cantón manabita frente a Bahía).
La capacidad hotelera actual es de 10 habitaciones. Hoteles emblema como La Piedra, Italia y La Herradura están fuera de servicio. “Nos reunimos con las autoridades de la Secretaría de la Reconstrucción y les dijimos que como comerciantes necesitamos un incentivo: créditos blandos a largo plazo”.
Las propuestas son varias, así como sus enfoques. Por ahora, Bahía de Caráquez respira una nube de polvo e incertidumbre por su futuro comercial.