Realizadas a lo largo de veinte años.
La obra se lanzó en Cuenca esta semana.
Hace cerca de veinte años, un día, mientras conversaban en su casa, el escritor Luis Carlos Mussó le pidió al poeta quiteño Paco Tobar García que le permita entrevistarlo.
En esa época este era un joven en sus veinte, y aún no tenía idea de qué haría con esa grabación, lo que sí tenía claro era que el autor, al que consideraba su maestro, estaba envejeciendo y él quería guardar sus reflexiones antes de que no pudiera hacerlo.
Esta fue la primera de muchas conversaciones que tuvo con poetas nacionales de distintas generaciones y que, recién en 2008, fue tomando la forma que hoy tiene; el libro ‘La orilla memoriosa’.
Esta, publicada a inicios de mes con la Casa de la Cultura Núcleo del Azuay, reúne entrevistas con 42 escritores líricos y tres críticos literarios, varios de ellos ya fallecidos.
De ellas ocho fueron publicadas previamente en medios locales, las demás son inéditas.
“Creo que nunca preguntaron exactamente para qué eran las entrevistas”, comenta entre risas. “Asumo que pensaban que era para alguna nota o alguna publicación, no consideraban que era algo así como un pasatiempo. Ya con el paso de los años se fue dando la idea del libro y tenía una justificación más legítima para conversar con mis entrevistados”, dijo.
Los escritores que engloban la obra, que se presentó esta semana en Cuenca y cuyos lanzamientos en Guayaquil y Quito se darán en los próximos meses, trazan cincuenta años de poética nacional.
Para ello Mussó viajó por todo el país y también recibió recomendaciones de los propios autores sobre quienes deberían ser las próximas voces que buscará.
Así conoció a autores como Jacinto Cordero Espinoza y a Fernando Nieto Cadena, con quien confiesa haber tenido una relación, que hasta ahora, solo ha sido epistolar.
“Nunca nos hemos visto de frente, la entrevista, y todo nuestro contacto ha sido a través de internet”.
Sin embargo, la conversación más difícil de concretar se dio con el recientemente fallecido crítico y escritor, Hernán Rodríguez Castelo, a quien intentó contactar sin éxito durante varios años.
“Era muy difícil de concretar una cita porque no usaba celular ni medios tecnológicos. Me tocaba buscar en la prensa a ver cuándo presentaría sus libros. Terminamos coincidiendo en Guayaquil, y no en su Quito natal”, estableció.
Un elemento sumamente interesante de los textos que conforman ‘La orilla memoriosa’ es que no abordan a los protagonistas desde su obra sino desde sus reflexiones personales sobre la poesía y sobre cómo estos percibían el complejo oficio de escribir.
La publicación de la obra tiene un tiraje de limitado, de tan solo 300 ejemplares, pero Mussó considera que es importante que este quede como documento histórico donde se preserva el pensamiento poético ecuatoriano del siglo XX.
“Estas voces se irán perdiendo de a poco. Creo que es necesario que se conserven. Me gustaría que haya un mayor tiraje, pero por su extensión comprendo que es difícil. Pese a esto, considero que es una labor necesaria”, señaló.
Espera publicar el próximo año un libro gemelo, que llevará el mismo título pero se centrará en entrevistas con narradores y dramaturgos.
En esa lista también figurarán autores ya ausentes como Miguel Donoso Pareja.