HACER FILA
El psicólogo clínico, Samuel Merlano, ideó una serie de efectos psicológicos que se producen en las personas cuando están en una línea. Como las esperas injustas, que parecen ser más largas que las equitativas. Ya que cuando no hay un trato justo y alguien más utiliza su tiempo, uno permanece con impaciencia, ira y agresividad, comentó el experto y agregó que, “las personas que tienen más fuerte su autoestima y conocen mejor sus derechos, son más exigentes en la atención y la agilidad de los procesos”.
Asimismo, el tiempo de espera distraído parece irse más rápido que el de ocio. Como cuando los usuarios se entretienen con su smartphone, en Facebook o viendo el último gol del equipo. “Por eso, en el tiempo que está el semáforo en rojo se le pasa rápido. Pero si está sin celular y apurado, siente que es una eternidad”, argumentó Merlano. Y cuantas más personas haya detrás de alguien optimizar el tiempo para los clientes, y se toman medidas y correctivos para cumplirlo. “Para un depósito en efectivo o pago de cheque, el tiempo promedio es de 30 segundos; en cambio para una transferencia al exterior debe ser de dos a tres minutos en ventanilla”, explicó.
No obstante, cuando se acerca un cliente con algunas transacciones es lo que retrasa la fila, explica Pezo, y como solución ciertas instituciones financieras han implementado en los cajeros automáticos la recepción de depósitos, “pero algunos clientes se resisten a utilizar esta herramienta por desconocimiento”, concluyó.
Sin embargo, en nuestra sociedad, donde parece que las colas se resisten a cambiar, aparecen emprendimientos tecnológicos en Guayaquil para agilizar las colas de las urbanizaciones. Como Pinlet, una aplicación móvil que permite autorizar el ingreso de un visitante por medio de un código. “Sentimos que algunos procesos -de actividades cotidianasse usan de la misma manera en que se realizaban hace 20 años. Como en una garita: se pierde tres minutos por carro mientras el guardia te comunica o pide la cédula. Y si hay más de cinco autos en espera, hasta 15”, comentó Emilie Bibliowicz, una de las socias del negocio que está aplicado en cinco urbanizaciones de la vía a Samborondón.
Hay más paciencia si de fondo suenan canciones pop clásicas. Jamás baladas ni novedades.