Costa Rica detiene a banda que traficaba con cubanos por Ecuador
El traslado de los isleños se hacía por avión con pasaportes y visas falsas
Un oficial de la Dirección de Migración de Costa Rica, destacado en el aeropuerto internacional Juan Santamaría de ese país, era uno de los principales eslabones de una organización dedicada al tráfico de migrantes cubanos que utilizaba a Ecuador como puente para trasladarlos desde la isla caribeña hasta México y desde allí cruzar a Estados Unidos.
La Policía de ese país detuvo ayer al oficial, de apellidos Ro- dríguez Mora, y a tres cubanos que trasladaban a los isleños con documentos falsos. No se precisó el número de isleños que habrían seguido esta ruta para llegar a conquistar el sueño americano.
Aunque desde diciembre de 2015 Ecuador exigió de nuevo visas a los ciudadanos cubanos, miles ingresaron libremente al país durante cinco años y utilizaron al país como puente para alcanzar el territorio estadounidense, a través de las vías aéreas, en unos casos, y la terrestre, en otros.
El líder de la organización, un cubano nacionalizado costa- rricense, identificado con el apellido Gallard, fue arrestado durante el allanamiento de dos viviendas en San José y en Alajuela, donde estaban su mujer y su hija, quienes también integraban la banda.
Según la investigación de Costa Rica, la organización captaba a los migrantes en Cuba, desde donde los movilizaba por avión a Ecuador. Después, ellos iniciaban una travesía por Perú, desde donde salían nuevamente en avión hasta Costa Rica y desde allí hasta México.
“Los migrantes viajaban vía aérea con documentación fraudulenta. Uno de los eslabones principales de esta organización era el oficial de Migración, Rodríguez Mora, quien se aprovechaba de sus funciones para facilitar la coordinación de ingreso al país de los migrantes en condición irregular, portando documentación falsa como pasaportes y visas extranjeras”, explicó la Policía Profesional de Migración, en un comunicado.
Tanto en Ecuador como en Costa Rica, la organización se encargaba de albergarlos en casa hasta que pudieran proseguir el viaje. Costa Rica tenía previsto informar a Ecuador sobre la banda y su modo de tráfico de personas.