Desde el comienzo
Hoy miércoles 24 de mayo, aniversario de la Batalla del Pichincha, que selló la independencia de lo que fue la Real Audiencia de Quito y se convirtiera en la República del Ecuador, con una ceremonia en la Asamblea, que antes se llamaba Congreso, se llevará a cabo el correspondiente cambio de mando. En él, como corresponde, el saliente presidente Rafael Correa le entregará el poder a su sucesor y camarada de la revolución ciudadana, Lenín Moreno.
Se ha usado, por pertenecer ambos al mismo color “verde flex”, el término “continuismo”, que permitiría decir lo de “primero de lo mismo”, aunque queda la expectativa, que significa optimismo para cierta oposición, de que el flamante mandatario imponga sus propios crite- rios, cambie de estilo (en el gobernar y en el decir) y no sea un simple continuador de esa etapa que los de AP consideran como “ganada”.
Sin embargo de que en las últimas “conferencias magistrales” del ahora exgobernante, recibiendo sendos doctorados “honoris causa” en universidades cubana y argentina, señaló el homenajeado que la política económica mantenida en estos años en el Ecuador permite dejar un país que es ejemplo de seguridad y estabilidad económica para los países del continente y hasta del mundo, ante la gran deuda adquirida por el Estado, no solo con naciones extranjeras (China, sobre todo) sino con los propios organismos nacionales - que han sido tomados como “caja chica y grande” del régimen-, el Banco Central y el IESS, mu-
...muchos se compadecen de la situación del nuevo gobernante, que tiene que comenzar su mandato haciendo milagros para honrar los compromisos existentes...’.