El último contrato que firmó Boris Córdoba
La ampliación del aeropuerto de Orellana costará $ 8 millones
Debieron pasar cinco años para que, en el último día del anterior Gobierno, se decida culminar con los trabajos de ampliación para el aeropuerto de Francisco de Orellana, en la provincia del mismo nombre.
El 23 de mayo, un día antes de dejar su cargo de ministro de Transporte y Obras Públicas, Boris Córdoba, firmó con el consorcio ecuatoriano Obraciv - Sedemi el contrato para la culminación de la ampliación de la terminal aérea Francisco de Orellana.
La inversión que deberá hacer la empresa es de ocho millones de dólares, y el plazo para la entrega es de 210 días calendario.
Los trabajos contemplan la ampliación de la terminal de pasajeros, construcción de torre de control, sistema de alcantarillado pluvial, ampliación de la plataforma e iluminación,
¿El objetivo? “Ofrecer un mejor servicio al usuario, incrementar los vuelos e impulsar las actividades socioeconómicas de la región, dedicada principalmente a la extracción petrolera”, señala un comunicado entregado por la cartera de Estado.
Los trabajos se iniciaron en 2012, según el MTOP, porque el edificio terminal tiene una sala general tan reducida que el nivel de servicio que ofrece el aeropuerto al usuario está por debajo del nivel que rige en el ámbito internacional. Adicionalmente la torre de control y el servicio contra incendios son insuficientes para cumplir de manera eficiente con los servicios inherentes a cada edificación, comprometiendo la seguridad operacional.