En las redes de la pornografía
Un hombre es investigado por comercializar en un ciber fotos y vídeos de niñas desnudas
explicó la fiscal Neira.
En efecto, fue la madre de una de las adolescentes la que activó la alerta, tras recibir la llamada de una amiga, quien le indicaba que las fotos de sus dos hijas (de 12 y 15 años) estaban circulando desnudas en las redes sociales.
Luego de un interrogatorio con su prole, la mujer se enteró que fue en el ciber donde les habían propuesto darles dinero por las fotos y vídeos de índole sexual. Situación que ocurría desde hace un mes.
“Primero les pidió que se hagan con ropa interior y luego sin ropa. Estos vídeos fueron enviados desde el celular de ellas al teléfono del administrador del ciber, que se aprovechaba de que las chicas iban para hacer sus tareas de colegio y así mismo les daba las facilidades de internet gratuito. Así hacían lo que él les pedía”, explicó la fiscal.
Durante el operativo, expertos del Departamento de Infor- mática Forense de la Policía Judicial incautaron tanto la computadora central como los monitores y CPU de las máquinas 17, 19 y 20, desde donde -según las denuncias- se han observado las fotografías y vídeos. Estos se habrían exhibido en el escritorio de cada una de las computadoras del local, lo que habría sido visto hasta por familiares de las menores.
Con base en esos elementos, la Fiscalía investiga un posible delito de comercialización de pornografía infantil, sancionado de 10 a 13 años de cárcel.
Las investigaciones apuntan no solo a determinar la implicación del administrador del ciber, sino de la existencia de una posible red de pornografía infantil y prostitución.
Y, aunque las menores accedieron al pedido del sujeto, las consecuencias para ellas son graves. Ya no asisten a clases. Muchos de los compañeros que observaron las fotos y vídeos les hicieron bullying, al punto de preguntarles ‘cuánto cobran’. Se conoce que las chicas están en manos de psicólogas del colegio, desde donde les enviarán las tareas para que no pierdan las clases.
La Fiscalía ha solicitado un perfil psicológico de ellas, con el fin de salvaguardar su integridad física y psíquica.