POR CIENTO
4 de las mujeres nacidas entre 1950 y 2017, en el cantón Nobol, fueron llamadas Narcisa, según el Registro Civil.
Hay un nombre que constantemente se repite en las listas de las escuelas de Nobol: Narcisa, el de su Santa. En este cantón guayasense la fe se mezcla con el trabajo del campo, el olor a maduro con queso y las actividades turísticas que genera la devoción a la Niñita Narcisa, nombre con el que cariñosamente la llaman.
A la entrada, un redondel con una estatua imponente de la Santa lo confirma. No cabe duda, se ha llegado a la tierra en la que ella nació. En esta zona los homónimos con la Santa son muy comunes. Narcisa de Jesús Morán es uno de ellos. No, no es descendiente de la Santa, pero comparte con ella sus dos nombres y uno de sus apellidos.
El 4 % de las noboleñas
Según el rector del santuario, Stanley Henriques, “dar a sus hijas el nombre de Narcisa es una forma de expresarle su gratitud. De hecho, en ocasiones, el haber podido concebir a sus pequeñas es una gracia que atribuyen a la intercesión de la Santa”. Ese es el caso de la mamá de Narcisa de Jesús Morán. Ella no quería tener un hijo varón, sino una mujer. Las comadronas del cantón habían predicho que lo que portaba en su vientre era un niño, sin em- bargo, no perdió la fe y acudió a pedir ayuda a la Santa.
Cuando llegó el parto, el bebé tomó por sorpresa a la familia Morán. A pesar de lo que la comadrona dijo, nació una niña. Ahora ella es una joven cuya vida está marcada por la guía de la Santa. Su participación en la iglesia es tan activa que incluso ha acudido a una jornada Mundial de la Juventud.
De acuerdo con los como ejemplo para todos los católicos, pero sin duda a nivel del Ecuador datos proporcionados por el Registro Civil, desde 1950 hasta el 2017 han nacido 17 mujeres que llevan por nombre Narcisa de Jesús y 123 que solo se llaman Narcisa. También señala que Narcisa de Jesús Manzaba es la persona con mayor edad registrada con ambos nombres