La falta de entrega de etapas le quita servicios a Terranostra
El ingreso estuvo sin energía por tres semanas ❚ CNEL dice que el mantenimiento lo hace la promotora ❚ Los cortes de agua y falta de alumbrado también afectan
Mantener una vida en comunidad se ha vuelto complicado para los habitantes de las once etapas que comprenden el conjunto habitacional Terranostra, ubicado en el kilómetro 13,5 de la vía a la costa.
La mayoría de las áreas comunes externas no cuenta con suficiente alumbrado público, no hay nadie que se haga cargo del mantenimiento de las mismas y constantemente registran cortes de luz y agua que terminan por dañar o quemar lo que ellos consiguen con autogestión. Además, algunas calles que conducen a las ciudadelas tienen baches o no están terminadas.
El último problema, que fue el que impulsó a los moradores a tomar la decisión de denunciar los hechos, fue el corte de energía que se produjo en el ingreso principal a la urbanización. Por casi tres semanas los habitantes tuvieron que pasar por calles oscuras para llegar hasta sus casas, con el peligro de ser asaltados en cualquier momento. Una situación que, aseguran los presidentes, sucede casi todos los meses.
“Aquí tenemos un conflicto grande con la luz. El alumbrado público de las calles muy poco tiempo pasa encendido y cuando se apaga tenemos que estar mandando cartas para que vengan a repararlo. Llegan, lo arreglan, pero a la semana otra vez se apaga. Hay un tema de instalación que tiene en conflicto a Etinar con la empresa eléctrica”, dice Javier Saltos, presidente de la etapa Alicante.
Los moradores explican que cada vez que le han pedido a la Empresa Eléctrica que realice el mantenimiento de las luminarias, ellos les dicen que no es posible, pues las etapas no han sido entregadas oficialmente a la ciudad.
“La respuesta es: no está entregado. Etinar y CNEL se lavan las manos en ese sentido, porque cuando pusimos una queja en la Defensoría del Pueblo, Etinar nos dijo que ellos sí habían querido entregar, pero que no lo recibían”, menciona René Endara, directivo de la etapa Vilanova.
“La constructora solo viene a arreglar cuando hay clamor de la gente, pues les enviamos escritos, cartas y les escribimos en redes sociales”, indica Saltos.
Roberto Zurita, de la etapa Ramblas, dice que hace algún tiempo un visitante se cayó a una de las lagunas y otros han sido víctimas de robo debido a la oscuridad. “Queremos que esto se solucione pronto”.
Los vecinos explican que la mayoría de los problemas que han tenido han sido solucionados con autogestión. “El terreno de la iglesia tiene alumbrado porque los moradores lo pusieron, igual en la zona del club y en el ingreso a las etapas”, dice Magdalena Salazar, de Vilanova.
El agua comunal también es otro de los temas en conflicto. Hace un par de años, comentan, Interagua estuvo a punto de cortar el suministro a una de las
DATOS VÍCTOR CHUNG SANG, directivo de la etapa Bonanova El puesto de los guardias no tiene luz, ni adentro, ni afuera. Parece que tiene un medidor, también una deuda pendiente. La gente camina en la noche y les pueden robar fácilmente. El malestar es constante y desde hace muchos años. Son soluciones parches las que nos dan. Nos contentan un rato, y de ahí ya nuevamente hay alguna otra falla.
etapas porque otra registraba una deuda de casi $ 30.000.
“Resulta que todo este grupo de macrolotes tenía un solo medidor de agua para los usos externos y la constructora se había olvidado de dividir el consumo. Esa deuda fue aumentando y ahora nos la han prorrateado entre las etapas”, menciona Saltos.
Ese inconveniente se suma a los múltiples cortes que, sin avisar, la empresa de agua les realiza cada semana a distintas horas del día.
Etinar, consultado por el tema, prometió ofrecer una entrevista a este Diario la próxima semana.