Un inicio de año con bajos volúmenes de exportación
Con excepción del camarón, el banano, el cacao y otros productos tradicionales reflejan caídas El clima y problemas internos afectan a sectores
Las exportaciones no petroleras se debilitan este año y agravan el saldo negativo que Ecuador tiene en su balanza comercial. Hasta febrero, este segmento creció apenas un 1,8 % frente al 23,8 % que registraron las importaciones.
Según el Banco Central del Ecuador (BCE), en esos dos meses el déficit de la balanza subió a $ 689 millones, versus los $ 201,9 millones reportados en igual período del año pasado. El resultado se debe no solo a un incremento inusitado en las compras de productos foráneos, sino al mal desempeño que tuvo la oferta de los principales productos no tradicionales, cuyo volumen de envíos descendió un 5,1 % este año.
Entre los productos que más pérdidas refleja está el cacao y sus elaborados. Los ingresos monetarios de este sector cayeron un 37,2 %, debido a un menor envío de productos. En esos dos meses se exportaron 35.000 toneladas del producto, versus las 53.000 del 2017.
Esta tendencia a la baja ya había sido advertida por la Asociación Nacional de Exportadores de Cacao (Anecacao) y este es un panorama que se prevé continuará en el transcurso del año. Así lo sostuvo ayer Juan Pablo Zúñiga, presidente del gremio, quien atribuye este problema a la baja productividad que en los últimos meses se detecta en las cosechas de este sector. “La recesión económica que el país ha tenido en los últimos años ha impedido que el pequeño y mediano productor tengan los recursos suficientes para dar mantenimiento a sus cultivos”. Que pueda hacer una buena poda, que pueda fertilizarlo, o que pueda atacar enfermedades
LAS DOS CARAS
como la monilla que se reactiva en cada invierno. “Al no dar mantenimiento, la productividad baja”, explica Zúñiga, quien calcula que este año la producción del sector podrá cerrar entre los 250.000 y 260.000 toneladas, unas 50.000 menos que en el 2017.
El banano, el producto estrella de la canasta exportadora, también registró un descenso de un 5,6 % en su oferta. El sector cafetalero, por su parte, disminuyó su oferta en un 34,7 %, las flores naturales en un 1,5 % y los enlatados de pescado en un 17,5 %.
En estos últimos sectores, como ya había contado este Diario, las bajas temperaturas registradas en los últimos meses fue lo que afectó la cosecha y las capturas. El camarón y el atún, en cambio, marcan la excepción en este débil escenario. Los envíos del primer producto crecieron un 20 %, mientras que el segundo, un 40,9%.
Este pobre registro en ventas preocupa a algunos analistas que afirman que en una economía dolarizada y recesiva se requieren de mayores esfuerzos para corregir el déficit de la balanza de pagos y equilibrar la balanza comercial. Así lo cree Adrián Ordóñez, gerente general de Coface, quien exhorta a las autoridades a fortalecer al sector exportador diversificando sectores y productos, fomentando la elaboración de otros productos con mayor valor agregado. “De esta manera, seremos algo menos vulnerables a las fluctuaciones de precio de nuestros productos y el ingreso de divisas será más sostenible”. Por otra parte, dice, es necesario trabajar en medidas que ayuden a apuntalar la competitividad del sector. Una de ellas es reactivar la devolución de tributos que permitirán que el productor pueda trasladar este incentivo a su sistema de costos.