Efectos geopolíticos de una década
EDITORIAL
Lo que está sucediendo en la frontera norte de Ecuador es consecuencia de un irresponsable manejo ideológico de los temas geopolíticos, los cuales requieren de tacto y de mucho tino. Lamentablemente, el gobierno anterior “coqueteó” con las guerrillas de las FARC. Incluso las reconoció como grupos beligerantes.
Luego de la firma del tratado de paz del gobierno de Colombia con ese sector de la guerrilla, era previsible que hubiese disidentes, los cuales mantenían -y aún los conservanfuertes vínculos con el narcotráfico y con los carteles internacionales. Por eso no iban a entregar las armas, ni a desmilitarizarse o a integrarse a la vida política y democrática del país vecino. El gobierno anterior debió prepararse para enfrentar esta situa- ción. Pero no lo hizo.
Tampoco hizo nada por dotar a nuestras Fuerzas Armadas de los recursos necesarios para enfrentar “eso que se veía venir”. Un sector de analistas de la situación fronteriza sostiene que en parte, esta es producto de una falta de estrategia, y de la ausencia de control y vigilancia hacia los grupos terroristas, lo cual fue posible gracias a los silencios y carencia de firmeza para con las facciones disidentes por parte del régimen anterior.
Durante la década pasada el gobierno actuó políticamente en esa línea, repercutiendo esta decisión sobre la efectiva vigilancia fronteriza y en el fortalecimiento de las Fuerzas Armadas y de la Policía en esa zona limítrofe. Hoy salen a la luz evidencias que muestran cómo y cuánto se debilitó a los sectores encargados de la seguridad
...no cabe solo tomar medidas efectivas de resguardo fronterizo y de rescate de los compatriotas secuestrados. Es importante que la ciudadanía no olvide que lo que hoy pasa en la frontera norte es resultado de un juego ideológico irresponsable ‘.
policial y militar de la frontera.
Varios sectores de opinión han señalado lo grave y perjudicial de esa política. Los actos de los grupos disidentes de las FARC hacen patente su calidad de facciones aliadas al narcotráfico internacional, que ya arrojan graves resultados: bombas terroristas, asesinatos a militares y el secuestro de periodistas.
Por eso no cabe solo tomar medidas efectivas de resguardo fronterizo y de rescate de los compatriotas secuestrados. Es importante que la ciudadanía no olvide que lo que hoy pasa en la frontera norte es consecuencia de un juego ideológico irresponsable, de un gobierno que no pudiendo controlar a las Fuerzas Armadas y a la Policía, tuvo la errónea decisión de debilitarlas. Estamos pagando el costo de una muy mala política fronteriza.