RODRIGO ICAZA “Palo Santo tiene un avalúo de $ 1,2 millones”
La Urbanización del Salado (Urdesa) adquirió el terreno que comprende Palo Santo en los cincuenta, pero el cuidado del bosque protector, como EXPRESO ha informado en días pasados, estuvo en el limbo todo este tiempo. El abandono del área, se defiende el gerente de la compañía, Rodrigo Icaza, se debe a que quien tuvo la administración no hizo nada... − Como propietaria del terreno, ¿cuál ha sido el rol de Urdesa en medio de este cruce de responsabilidades por la administración de Palo Santo? − En 2014, cuando el Ministerio del Ambiente delega la competencia al Municipio de Guayaquil (luego de que Ecosalud la tuvo desde 1996), la abogada de la compañía pidió al Cabildo que expropie el terreno; pero se pasaban la pelota. El ministerio pedía un plan de manejo al Municipio y este respondía que era su competencia. En el medio estábamos nosotros, pero nunca se concretó la venta del terreno. Hubo trabajos. Pusieron bancas, por ejemplo, hoy destruidas, pero nunca se
creó un plan de manejo, aunque nosotros lo reclamamos en varios oficios.
Cuando Ecosalud estuvo a cargo, de 1996 al 2014, ¿intervinieron ustedes, como propietarios, de alguna forma?
− − Primero, nadie sabe por qué se decidió que Ecosalud se sume a este tema. Sería bueno preguntar a quién le rendía cuentas. Lastimosamente, nosotros solo estuvimos como espectadores, pese a nuestra oposición a todo esto. En algún momento hasta se implementó una ‘gruta de la virgen’, ahora también en abandono, pero Urdesa nunca autorizó aquello. Las autoridades fueron notificadas de este descontento, pero callaron. − ¿Por qué tuvieron una actitud pasiva ante este escenario? − Ingresar a la fuerza pudo costarme prisión u otras complicaciones. No se me permitió ni cercar el terreno. Decían que estaba en litigio. − ¿Qué pensaba construir Urdesa en Palo Santo? − Nada. Lo que se requería es ser claros. El bosque no es la área protegida que se dice. Tenía diez hectáreas, pero en manos de Ecosalud quedaron solo cuatro. El resto está urbanizado...
EL CONTEXTO En 1996, el Ministerio del Ambiente le entregó la administración de Palo Santo a la fundación Ecosalud, con la cual la Urbanizadora del Salado (Urdesa), propietaria del terreno, no tiene vínculos. Rodrigo Icaza, gerente de la empresa, llega a EXPRESO a ofrecer su versión de la historia, tras conocer que el Cabildo expropiará. Elbosquenoesla áreaprotegidaquese dice.teníadiez hectáreas,peroen manosdeecosalud quedaronsolocuatro. Ingresar a la fuerza pudo costarme prisión u otras complicaciones. No se me permitió ni cercar el terreno.
− ¿Hubo acercamientos ya con el Municipio? − Luego de las publicaciones de EXPRESO, la Dirección de Ambiente nos convocó a una reunión, sin notificarnos que el Concejo Cantonal trataría el tema de la expropiación. Decidimos entonces esperar la resolución... − En esa sesión que menciona se decidió la expropiación. − Así es. Si el Municipio lo decidió, deberá reconocer el justo precio del área. Hay un avalúo catastral municipal que valora las cuatro hectáreas de Palo Santo en $ 1,2 millones. Ahora solo esperamos que la resolución sea socializada. − Ya se habló de aquello en medios... − Pero a nosotros no nos han dicho nada formal. Es terrible que no se nos haya llamado como propietarios a la sesión de Concejo y que, en lugar de eso, se le dé cabida -a través de una concejal- a colectivos...