ZLATAN IBRAHIMOVIC, CON EL EGO RENOVADO
116 PARTIDOS jugó con su selección y participó en los Mundiales de Japón - Corea 2002 y Alemania 2006. La llegada a Estados Unidos revitalizó el humor del delantero sueco de 36 años y ahora vive el sueño americano a su manera EL DETALLE ¿Sabes cómo se siente el estar en la parte más alta del deporte más grande del mundo? Pues así me siento.
Zlatan Ibrahimovic lo entiende todo. Desde lo que sucede en la cancha hasta lo que se necesita afuera. Lo controla de forma calculada y lo vende adecuadamente. Siempre soltando frases llamativas pero riéndose en el acto. Así consigue ganarse a la fanaticada de cuanto país visita.
Ahora, el delantero sueco, de Los Ángeles Galaxy, es una de las estrellas más buscadas en el país del norte, no solo por sus goles sino por la forma de sumarse al show.
En el conocido programa de Jimmy Kimmel, Ibrahimovic se subió a la ola y soltó algunas frases dignas de un ego que se ha renovado con el traspaso y con toda la atención que está recibiendo, ya sea en coliseos de baloncesto o en centros comerciales. Ahora, de nuevo es el amo. Aunque, según sus palabras, nunca dejó de serlo.
Y esa imagen la vendió desde el día que llegó a Estados Unidos. El anuncio de su llegada no pudo estar más a la altura de su autoestima. Se pagó una página completa de Los Ángeles Times para poner dos líneas: Querido Los Ángeles, de nada.
Y lo explicó en el show. “He tenido los ojos puestos en Los Ángeles durante muchos años y quería hacerles un regalo. Llevaba tiempo pensándolo y un día me vino a la cabeza: debería regalarme a mí mismo. Esto se me ocurrió y, bueno, de nada”, dijo sonriendo. Entre sus frases más celebradas en el show, Ibrahimovic dijo que no era “el típico sueco, pero yo puse a Suecia en el mapa”. Lo dijo, tras compararlo con otros suecos, no tan pretenciosos. Al sueco de 36 años le gusta la atención. Pero tiene una forma divertida de agradecerlo. “Me dijeron que en Los Ángeles iba a poder caminar tranquilo por la calle, pero no es así. La culpa es mía por jugar como juego”. Ibrahimovic, acostumbrado a ser el centro de atención, no teme generar algún recelo entre sus compañeros, por las licencias que recibe. Para él, no hay motivos para preocuparse, ya que todos serán estrellas. “Yo hice a mis compañeros unas súper estrellas, así como contigo hoy”, le dijo a Kimmel.
Adelantó que estará en Rusia 2018 porque “un Mundial sin Zlatan no es lo mismo”.
Aunque no aclaró si será como jugador, ayer se confirmó que irá con una marca comercial que auspicia al torneo ecuménico. En la entrevista, contó que su nombre significa ‘oro’, pero ante la dificultad de pronunciarlo empezaron a decirle ‘Ibra’. “Ahora soy León”, concluyó.