Las leyendas religiosas son parte de la historia de la capital
La capilla del Señor de los Milagros tuvo su origen en una escena de violencia ❚ En 1680 se inició la construcción de la ermita y hoy se convirtió en un templo
EL DETALLE En la obra. En la remodelación trabajaron veinte obreros, diez restauradores y cinco técnicos especializados. SANTUARIO
La capilla del Señor de los Milagros es parte de la jurisdicción eclesiástica de San Marcos, aunque se encuentra en la Loma Grande, centro de Quito.
Este templo siempre fue asistido por el párroco de ese sector desde el año 1600. Sin embargo, la devoción no inició propiamente en una estructura acabada como la que se encuentra actualmente, sino en una ermita. Se conoce a esos sitios como espacios donde los ermitaños oraban y hacían recogimientos espirituales.
La tradición y la leyenda, que es un patrimonio oral, cuenta que es una escena violenta, lo que da inicio a esta obra.
Hace casi 400 años, había una mujer que habitaba en aquellos rincones quiteños. La mayor parte del tiempo, ella salía hacia los potreros que abundaban por la actual Loma Grande. Siempre llegaba a esos pastizales para vigilar al ganado que poseía.
Sin embargo, la gente miraba que la señora casi nunca pasaba sola. La acompañaba un hombre de mucha belleza. La descripción de esos encuentros, que a ojos de los chismosos eran amorosos, no tardaron en llegar a los oídos del marido de la hermosa muchacha.
Un día, las sospechas carcomieron los pensamientos del esposo, quien se sentía traicionado. Fue entonces que la siguió sigilosamente. Constató, efectivamente, que ambos ‘amantes’ se encontraban en un terreno. Ciego de ira, se abalanzó contra ambos. Con un cuchillo hirió de muerte al hombre y la mujer, huyendo