El presidente celebra con los niños en Guayaquil
El hogar Guayaquil fue el escenario del agasajo por su Día Internacional
La música infantil inundaba sutilmente los aproximadamente 300 metros cuadrados de construcción en los que decenas de niños, de pañales y hasta 9 años de edad, jugaban en un día que, por la reacción de los más grandecitos, sabían que no era un día común en la casa hogar Guayaquil, en la ciudad del mismo nombre, ubicada en la avenida del Bombero.
En la escenografía del ambiente de fiesta, por el agasajo por el Día Internacional del Niño, resaltaban un árbol con ojos, el césped artificial y hojas que simulaban un jardín con juegos de rayuelas, escenario de títeres y muchos juguetes sobre las pequeñas mesas, en torno a las cuales estaban sentados los niños y sus cuidadoras.
El presidente Lenín Moreno y su esposa Rocío fueron recibidos con abrazos de los más grandecitos, mientras los pequeños seguían distraídos en sus actividades, sin ninguna noción de quiénes eran esas dos personas acompañadas por el gobernador José Francisco Cevallos, su esposa y la ministra de Inclusión Económica y Social, Berenice Cordero.
Los vieron entrar y seguir hacia una sala, sin acceso a la prensa, y después retornar para sentarse junto al círculo formado por los niños y sus acompañantes y personal del Ministerio, más los guardias de seguridad presidencial.
Un hada entró en escena para iniciar un diálogo con un gato abandonado en un basurero, en lo que constituyó el número principal de un espectáculo, en el que actuó también el presidente Moreno, al ubicarse al centro del escenario y cantar canciones infantiles sobre los tres cochinitos, pinocho y el carrito que hacía pit pit. Las manuelas entregaron regalos, confites y helados, en un cierre de telón que fue con un concurso de rayuela, a cuyos participantes Rocío Moreno le entregó más regalos.
Hubo niños que pasaron más distraídos con los juguetes que tenían en las mesas que poniendo atención al espectáculo y los diálogos con un gato que, eso sí, tomaron de la mano cuando se lo acercaron.
El presidente Lenín Moreno evitó hablar con la prensa y fue la primera dama, Rocío González, quien dijo, a nombre del Gobierno, que están trabajando en todas las áreas y autoridades, para mejorar la calidad de vida de los niños de la casa hogar Guayaquil y de todas las que hay en el país. A nivel nacional, en los agasajos participaron 25 ministros y otras autoridades.
Los visitantes se fueron y los pequeños siguieron jugando, con los nuevos juguetes y el muñeco Ñum que se le regaló a cada uno. Así fue su día con el presidente.
LA FRASE Todos estamos trabajando para los niños, porque son la raíz y la razón de la vida de todos nosotros.