ROBOTIZACIÓN
La compañía china Foxconn sustituyó hace dos años a 60.000 trabajadores por robots. Es probable que las personas con menos habilidades pierdan sus empleos.
La inminente apertura de la planta de producción de robots reabre el viejo debate del hombre contra la máquina, vivo y después latente desde la primera revolución industrial. Según un informe de la OCDE, más de 60 millones de trabajadores correrán el riesgo de ser reemplazados por robots en los próximos años. El 14 % de los empleos de los países desarrollados, de acuerdo al mismo estudio, son altamente automatizables. Más del 30 % seguramente experimentará cambios muy significativos. La industria manufacturera y la agricultura son los sectores en los que más impacto tendrá la industrialización 4.0, como llaman los economistas a esta revolución tecnológica que ya se está produciendo.
El debate entusiasma al profesor de Robótica, Marko Munih, de la Universidad de Liubliana. Munih solo ve beneficios en esta revolución, que según la Federación Internacional de Robótica (IFR) crece a un ritmo del 15 % anual desde 2010.
El ingeniero electrónico, al menos a corto plazo, no vislumbra una automatización completa en la industria, más bien la colaboración entre los dos. Uno haciendo el trabajo pesado, redundante, y el otro el que requiere complejidad, precisión e imaginación.
¿Los robots ponen en peligro el empleo de los trabajadores menos cualificados? Munih no comparte la visión de la OCDE. A su modo de ver, el pasado de-