ANTONIO LEDEZMA
EL CONTEXTO La situación de Venezuela es crítica. Ecuador, luego de 10 años, reconoce que el país sudamericano atraviesa un momento político, económico y social complicado, que se lo siente con el impacto de la migración. Antonio Ledezma, uno de los rostros opositores en el exilio, habló con EXPRESO.
Es su primera vez en Guayaquil. Viene a hablar de su país, Venezuela. Antonio Ledezma describe la situación con indignación. Hoy estará en Machala donde brindará una conferencia denominada ‘Libertad y democracia’. − La situación en su país es noticia casi todos los días y la pregunta a estas alturas es: ¿cuáles son las opciones que tiene Venezuela para salir de este episodio? − Lo que corresponde es activar el principio de intervención humanitaria que es lo que vengo invocando, que no es otra cosa que la obligación que tienen los gobiernos democráticos del mundo de asistir a un pueblo que es víctima de una represión masiva y sistemática como en Venezuela... Parece que la solución no pasa por la mente de muchos gobernantes. Me pregunto: ¿qué más pruebas quiere la comunidad internacional para convencerse que es momento que hay que dar un paso al frente?
Venezuelaeselcampo deconcentraciónmás grandedelahistoria. Hitlerlosmatabacon gas,madurolosmata dehambre.
− Los organismos internacionales, como la OEA, Mercosur y otros, lanzan declaraciones en contra del Gobierno de Nicolás Maduro, ¿sirven de algo? − Lo que corresponde a la comunidad internacional es hacer efectiva la salida de Maduro del poder. Cualquier mediación que cualquier Gobierno quiera ofrecer es para definir los términos de la salida del dictador. − ¿No hay otra salida? − No, porque Venezuela está secuestrada. No vale la Constitución, ni las leyes. Maduro hace lo que se le antoja. No dependemos del Estado de derecho sino del estado de ánimo de Maduro como ocurría también con (Hugo) Chávez. Venezuela es además un país invadido por fuerzas militares extranjeras. Hay más de 30 mil cubanos metidos en las guarniciones, cuarteles, en las notarías, en los registros que hostigan a los venezolanos. Chávez y Maduro convirtieron