Un título con garantía laboral
Es positiva la percepción estudiantil con respecto a su acceso al trabajo ❚ Los empleadores prefieren contratar a graduados de la Escuela Superior Politécnica
Conseguir trabajo en el ámbito profesional de la carrera elegida antes de graduarse es una suerte de pocos. Y tenerlo después de su graduación es el ideal de todos.
La Escuela Superior Politécnica del Litoral (Espol), una de las mejores universidades a nivel nacional, que recientemente avanzó en el ranking de las mejores de Latinoamérica, graduó (como publicó ayer este Diario) a 1.400 nuevos profesionales, para los cuales el panorama laboral parece alentador.
EL DETALLE Cifra. Según la Organización Internacional del Trabajo, 5 de cada 10 jóvenes tienen empleo en el país, cantidad que se replica en Latinoamérica.
Según las cifras facilitadas por la universidad, la tasa de empleabilidad es del 69 %, es decir que más de la mitad de los graduados logran obtener una plaza de trabajo conforme a la carrera que eligieron.
Diego Quichimbo tiene 26 años, el viernes se licenció en Diseño Gráfico y Publicidad, y confiesa que “en el lugar donde yo trabajo, mi jefa solicitó para mi puesto, exclusivamente, estudiantes de la Espol por la experiencia positiva que tuvo la empresa con nuestra contratación”, agrega como anécdota.
Paúl Herrera, vicerrector de la Espol, explica que “el hecho de que la universidad tenga las mejores posiciones en reconocimiento académico hace a su vez que se valore más al graduado de la Espol”. Asimismo, comenta que existe un porcentaje de estudiantes que no trabajan después de su graduación, sino que siguen formándose para obtener el título de cuarto nivel.
De acuerdo con una encuesta laboral en Ecuador realizada por la consultora Deloitte en 2014, uno de los factores que un empleador toma en cuenta al momento de reclutar a su personal es la universidad de la que proviene, lo cual influye en un 50 % de la decisión.
Erick Roldán, ingeniero en Electrónica Industrial, explica que sus expectativas como graduado politécnico son positivas porque “la universidad cuenta con la certificación internacional ABET, lo que nos permite emplearnos internacionalmente también”, dice emocionado.
El registro ABET del que habla Roldán lo otorga una organización estadounidense que acredita los programas de ingeniería, tecnología, computación y ciencia aplicada, que avala aproximadamente 2.800 programas en más de 550 institutos de educación superior y universidades alrededor del mundo.
VOCES ANDREA LASCANO, licenciada en Diseño Gráfico y Producción Audiovisual Se me abrieron las puertas como diseñadora de comercio exterior. Y sí, muchas veces depende de la persona, pero los de recursos humanos siempre ven la universidad.