Historia y grillete
Hay una historia de cepos, grillos, esposas y grilletes, antigua, moderna y posmoderna. Con su uso se señalan procesos de apresamiento, culpabilidad o posible implicación en diferentes hechos relacionados con delitos contra la sociedad, la propiedad, el Estado y los particulares.
Cada momento histórico ha dado sentido a su uso. Cuando eran apresados los libres pensadores en cárceles y mazmorras, los regímenes despóticos les pusieron cepos y grilletes como medida represiva. A varios hombres y mujeres les fueron impuestos abusivamente: Galileo Galilei, Giordano Bruno, Juana de Arco, Francisco de Miranda, Miguel Hernández, Rosa Parks, etc. Otros, que los merecían, los eludieron: Hitler, Mussolini, Franco, Pinochet, Videla, Chávez. Hoy, Maduro, Ortega, etc. Aunque la sociedad pedía y pide que se los impongan. Ahora se los modernizó. La nueva tecnología suprimió las pesadas cadenas y los grilletes anteriores. En la última década el Ecuador adquirió los modernos para descongestionar las cárceles y vigilar con “libertad condicionada” a los delincuentes.
En el país existían personas a quienes injustamente se los impusieron. Los casos de Villavicencio y del diputado Jiménez son emblemáticos. Fueron juzgados y sentenciados simplemente por denunciar la corrupción. La sociedad democrática dijo que tal hecho era, aparte de injusto, humillante. Se lo hizo para golpear y debilitar la fuerza moral de esos dos dirigentes populares por dar a conocer hechos de corrupción del anterior gobierno.
Pero asimismo, un amplio sector de la colectividad pedía que les fueran impuestos a algunos funcionarios implicados en corrupción. Por eso ahora que una jueza ha decidido ponérselo a un déspota, niño bien y engreído del correato, el Ecuador profundo dice: “la justicia tarda, pero llega”. Dios a veces trae la reivindicación del pueblo aunque sea tarde. Quienes recuerdan a ese exfuncionario en su modo de tratar a los ciudadanos, hoy dicen: “Bien hecho, se lo merecía”.
Sea lo que fuere, lo cierto es que el grillete tiene su historia, como también quienes lo han merecido o no. Este ejercicio no es otra cosa que una exposición de la necesidad urgente de repensar la justicia en el país.