Los cubanos se enfocan en la consulta
135.000 asambleas para expresarse sobre la nueva Carta Magna
Entre homenajes al fallecido expresidente Fidel Castro en su 92 cumpleaños póstumo, Cuba abrió ayer el proceso de consulta popular de su nueva Constitución con las primeras reuniones de ciudadanos que durante tres meses propondrán cambios en el texto previamente aprobado por el Parlamento.
“Cada opinión de los compañeros se va a recoger en un acta, y todas ellas van a contar”, anunció Suset Lameret, coordinadora de la reunión de trabajadores del Policlínico Vantroy 1 iniciada en el populoso municipio de Centro Habana, en el corazón de la capital.
Como esta, en la que participaron unas 50 personas y se prolongará hasta mañana, hay programadas hasta el 15 de noviembre 135.000 asambleas en las que los mayores de 16 años de ese país de 11,2 millones de habitantes están llamados a expresar sus opiniones y sugerir cambios en el texto de la próxima Carta Magna.
“Ojalá todo el mundo pueda aportar su granito de arena y ser escuchado. Hacía años que no teníamos esta posibilidad”, declaró termina el proceso de consulta al que están llamados unos 8,5 millones de cubanos. el traumatólogo Amilso Ávila, que participa en las reuniones del policlínico.
El doctor considera que el proyecto, aprobado el pasado 22 de julio en el Parlamento, “tiene pocos artículos en la parte de salud pública”, por lo que ha preparado algunas aportaciones que espera sean contempladas.
Por su parte, la directora de asistencia médica del policlínico, Liliana Darrosa, comenta que no tiene “nada nuevo que aportar” y asiste a la asamblea para expresar su apoyo al proyecto tal y como está redactado.
Aunque no modifica el sistema político, el documento sí reconoce la propiedad y empresa privadas, elimina las alusiones al comunismo, establece la figura de primer ministro y redefine el matrimonio como la unión entre dos personas sin especificar su sexo, lo que abre las puertas a una eventual legalización del matrimonio homosexual.
EL DATO Jueves