El arremetido puente Durán-santay: “De villano a héroe”
Lo que pasó con el barco de 10.000 toneladas que iba a ser deshuesado en una acería a orillas del Guayas en Durán y frente a la isla Santay era lo que debía suceder cuando normas de seguridad no se aplican en el amarre mismo y el seguimiento de los amarres en el tiempo.
Ya surgieron personajes que acusan al puente de ser la causa del accidente. Culpable de estar allí. Tal como sucedió en octubre pasado con el otro puente que une Guayaquil con Santay y que sufrió similar situación, con la diferencia de que el pesquero de entonces estaba tripulado y casi operativo. También culpable de estar allí. Puentes malos, inservibles, mal construidos, etc., esas eran las consignas de importantes sectores en contra de ellos.
Pero lo que no se dice es que uno de esos puentes “villanos”, se convirtió en héroe al obstaculizar que un mastodonte flotante de miles de toneladas y decenas de metros de eslora salga sin rumbo a la deriva por el Guayas y en esas condiciones se vaya estrellando con todo lo que se encuentre a su paso y tomando velocidad impacte contra muelles y casas como el caso de Las Peñas o los malecones de Durán o Guayaquil o puentes como el mismo de Guayaquil a Santay o el de la Unidad Nacional. Pues de eso nos salvó el ahora malogrado puente. No pido una condecoración para él que bien lo merece, pero sí acabar con tanta posición deshonesta contra ellos. Cumplen su función, nos unen a todos y con eso basta.
Ing. Nvl. José Delgado M.