Un patrimonio de sabor manaba que deleita a Guayaquil
La Estrella de Plata en la feria ‘Raíces’ traslada su sazón también a los supermercados
Revivir recuerdos de la infancia y la familia a través de la gastronomía parece un reto difícil. La Herencia Manabita, el local ganador de la Estrella de Plata en la feria gastronómica ‘Raíces’, se lo planteó y “sin imaginarlo”, como cuenta Lupe Gutiérrez, propietaria, “lo logramos”, menciona satisfecha. Gutiérrez, quien se considera una amante de la comida manabita, quiso traer a la ciudad junto a su hermana Carmen, la tradición de tres y cuatro generaciones atrás de su natal Bahía de Caráquez. Para hacerlo “no solo usamos ingredientes de calidad, sino también respetamos los procesos de preparación”. Este último tema lo ejemplifica explicando que “la tortilla de yuca, acorde con la cultura, debería prepararse en tres días, no en unos pocos minutos”.
La mezcla de la minuciosidad en la preparación y su afán por no perder las costumbres dio como resultado el plato ‘Pásame al otro’, el segundo plato estrella de ‘Raíces’, un alimento servido sobre una base de cocolón suave, cubierto con una menestra de verde y carne desmechada acompañada de una salsa de cebollas, col y cilantro. “Ese plato tomó su nombre en un pueblo de Manabí, porque una señora vendía el preparado pasando el río, y quienes iban hasta allá debían decirle al canoero ‘Pásame al otro lado’, narra.
El triunfo culinario del negocio motivó a Gutiérrez a expandir su territorio de sabor, no solo en su restaurante, sino también en los supermercados de la ciudad. “Esto era parte de un proyecto que teníamos desde que inició el negocio. Próximamente estaremos ofertando al mercado nacional e internacional productos congelados como tortillas de verde y de yuca, corviche y sal prieta”.
Si bien la cocción de los ingredientes de forma artesanal es el gran atractivo del negocio, La Herencia Manabita también acoge a sus comensales en un local acondicionado al estilo de la provincia costeña.
De la pared, pintada de plantas de verde, cuelgan sombreros de paja toquilla, un machete, una hamaca y algunas fotografías en blanco y negro de patrimonio familiar.