La prensa en EE. UU. le responde a Trump
Más de 300 diarios en ese país, en ofensiva contra las injurias del presidente ❚ Los editoriales defienden la libertad de expresión
La prensa de EE. UU. ha dicho basta. Después de casi dos años de insultos, amenazas, falsedades y calumnias del presidente Donald Trump, más de 300 periódicos de todo el país (desde el humilde Van Buren County Democrat hasta The New York Times o incluso el británico The Guardian) publicaron ayer editoriales de distinto contenido y longitud, pero con un mismo propósito: defender la libertad de expresión en el país de la libertad de expresión. Aquí va un resumen de la opinión de los principales diarios:
EL DETALLE Bando. Según un sondeo, el 43 % de los republicanos cree que el presidente debería tener autoridad para cerrar medios que presenten una “mala actitud”.
En letras mayúsculas y con el título “La prensa libre te necesita”, The New York Times, uno de los objetivos principales de las invectivas presidenciales, recordó que el pueblo tiene derecho a criticar a la prensa, pero que “insistir en que las noticias que no te gustan son noticias falsas es peligroso para la vitalidad de la democracia. Y llamar a los periodistas ‘enemigos del pueblo’ es peligroso, sin más”.
The Boston Globe puso: “La libertad de prensa es esencial para asegurar la libertad”, escribió John Adams. “Durante más de dos siglos, este principio fundacional norteamericano ha protegido a los periodistas en el país y ha servido de modelo para otras naciones libres. Hoy está seriamente amenazado. Y envía la señal alarmante a los déspotas, desde Ankara hasta Moscú, Pekín o Bagdad, de que los periodistas pueden ser tratados como un enemigo interior”.
The Topeka Capital Journal, un periódico que apoyó la candidatura de Trump en 2016, calificó los ataques del magnate contra la prensa con dos palabras: “Siniestros y destructivos”. “Deben terminar ahora”, aseguraba el rotativo.
En la misma línea, The Des Moines Register, de Iowa, publicó que “los verdaderos enemigos del pueblo (y de la democracia) son quienes tratan de sofocar la verdad vilipendiando y demonizando al mensajero. La respuesta no puede ser el silencio”.
El Dallas Morning News, el gran diario conservador de Texas, se expresó así: “Si el presidente ve información errónea, tiene el derecho y el deber de denunciarlo y mostrar los datos. No vamos a fingir que todas las historias que han aparecido en todos los medios que cubren al presidente han sido impecables. Pero tampoco vamos a fingir que no está en juego aquí una cuestión más amplia, que afecta a la libertad de la prensa de
LA FRASE Lagrandezadeee.uu. dependedelpapelde unaprensalibreque puedadecirlaverdadalos poderosos.
cuestionar las cosas y que afecta a los verdaderos fundamentos de nuestra república”.
The Philadelphia Inquirer, el tercer diario más antiguo de Estados Unidos y con varios premios Pulitzer en su haber, afirma que “como lugar de nacimiento de nuestra democracia, Filadelfia también fue uno de los lugares de nacimiento de la prensa libre y el Inquirer, nacido no mucho después del propio país, continúa orgulloso con este legado”.
The Miami Herald, muy influyente en América Latina, insiste en su editorial en que las palabras importan. “Las referencias a la prensa como ‘enemigos del pueblo’ no son menos peligrosas porque resultan estratégicas. Es como los nazis llamaban a los judíos. Es como marcaron a los críticos de Stalin para que fueran ejecutados”.
La prensa en español en Estados Unidos tampoco se quedó atrás. En su editorial, los diarios La Opinión, La Raza y La Prensa, que se publican en Nueva York, Chicago y Los Ángeles, aseguran que “como latinoamericanos conocemos bien en carne propia lo que significa la erosión del periodismo, la intimidación a los reporteros, la autocensura, la ambición desmedida de la presidencia. Se dice que en Estados Unidos esas cosas no ocurren”.
Trump tuiteó ayer que “no hay nada que (él) quisiera más” para Estados Unidos que “la verdadera libertad de prensa”.