‘Strippers’

Algunos candidatos que se perfilan para las próximas elecciones han sido de otros partidos. No sé hasta qué punto esto nos genera desconfianza a la hora de elegir por quién vamos a votar.

Tal vez dependiendo del partido al que pertenecieron y/o la buena o mala fama que pueda tener dicha organización.

También se complica nuestro proceso de decisión en eso de comprender cómo de un partido de izquierda pasan a formar parte de un partido de derecha, casi neoliberal. A mí me resulta muy difícil eso de que un día eres socialista y otro día te hiciste de derecha.

Pero, bueno, pensemos que dicha ideología no lo llevó a buen puerto y no tuvo otra opción que cambiarse de camiseta. Pensemos que no fue su culpa. Sea porque los líderes no diseñaron las políticas públicas para convertir en realidad los sueños o porque se decepcionó en lo personal.

También hay que considerar que pudo darle la gana de salirse sin ninguna otra razón que su deseo.

La cosa se complica más cuando se trata de corrupción, cuando te das cuenta de que dichos ‘strippers’ políticos se desnudan del ropaje socialista para vestirse con populismo y/o derecha o viceversa, todo por un mejor nivel de vida. Es decir, por dinero.

Y si queremos enredarla más, las decisiones electorales no son nada fáciles cuando los candidatos públicamente se han insultado con sus compañeros de partido, asaltándose entre sí sus cuotas de poder. Porque, ¿hasta en las mafias hay códigos que respetar, no?

Al final, la política, a todos ellos ha podido desnudarlos, dejándonos ver cuán limpia, formada y transparente o no es su vocación de servicio público.

Sin embargo, lo peor de todo es que la desnudez de estos bailarines ya no nos llama la atención. Los medios de comunicación destinan páginas de páginas recordándonos cuán corruptos han sido y no pasa nada.

Ellos no tienen vergüenza. ¿Nuestros votos tendrán la vergüenza suficiente?

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