El cuy es utilizado como una ‘radiografía’ de enfermedades
En el centro de Quito utilizan a las cobayas como medio para diagnosticar y sanar las dolencias ❚ Esta creencia ancestral la heredaron de sus antepasados
EL DETALLE Elementos. Tras conocer el tipo de mal, se preparan varios artículos de trabajo como cigarrillos, huevos, plantas medicinales, chonta y piedras del poder. CURACIONES
Los rayos de luz solar ingresan tenuemente por las rendijas, mientras algunas velas de colores encendidas y colocadas en circunferencia alumbran la pequeña habitación donde se realiza la consulta.
No se trata de un consultorio donde el médico intenta conocer las dolencias de su paciente. Es un humilde cuarto donde Juan Francisco Caizón, más conocido como Panchito, efectúa curaciones a personas que tienen dolencias naturales o a aquellas que presuntamente fueron ‘brujeadas’.
Los días que más trabajo tiene son los martes y viernes, considerados ‘maravillosos’ para la limpia.
Todo este trabajo lo realiza con la ayuda de un pequeño cuy, práctica que es considerada como una medicina casera o alternativa en el país.
El animalito es muy apetecido en la gastronomía ecuatoriana, especialmente en las poblaciones de la Sierra, por su buen sabor y la infinidad de proteínas que brinda esta especie de roedor. Pero también es importante para los curanderos, que los utilizan para la sanación de distintos males.
Francisco, de 42 años, oriundo de Cotopaxi (de la comunidad Zumbahua), hace varios años llegó a vivir a la capital y de su cabeza no se le quitó la idea de seguir la ‘profesión’ de su abuelo Mariano Cuyo, quien se encargaba de este tipo de ‘curaciones’. “Desde los siete años sabía acompañar a mi abuelito a todas partes. Sentadito veía cómo con el cuy hacía las limpias. Eso se grabó en mi cabeza y me quedé con esa herencia”, manifestó el hombre, de contextura