Sube de tono la guerra por los lazos amarillos
Quitan y ponen en Cataluña los símbolos con que reclaman la liberación de independentistas ❚ Ciudadanos pasa a la acción
En un buscado golpe de efecto tras días denunciando la “ocupación” del espacio público en Cataluña (España), el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, y la líder del partido en Cataluña, Inés Arrimadas, retiraron ayer en la mañana con sus propias manos lazos amarillos de plástico atados a lo largo de una valla en la calle del municipio de Alella (Barcelona). Fueron increpados por algunos vecinos de la localidad al grito de “¡fuera!”, “¡vergüenza!” y “¡fascistas!”, mientras sus simpatizantes les aplaudían.
El líder de Ciudadanos contestó a un hombre que le gritó en catalán “¡Iros a Madrid, desgraciados!”, en la misma lengua: “Es nuestra casa y aquí estaremos”.
EL DETALLE Operativo. Vestidos como operarios de desinfección, unas ochenta personas pasaron toda una noche retirando símbolos independentistas en Girona.
Por las calles de Alella, un pequeño municipio de menos de 9.600 habitantes a 20 kilómetros del centro de Barcelona, la presencia de los lazos amarillos con los que se protesta por la libertad de los independentistas encarcelados es muy numerosa. Están en las vallas de la acera, en los bares o en las rejas de las ventanas de los edificios de la Plaza del Ayuntamiento. De la fachada del Consistorio cuelga de hecho una gran pancarta con el lema “Libertad presos políticos” y un lazo amarillo, y en la parte trasera hay una estelada.
Rivera y Arrimadas no contestaron a las protestas ni a los pitidos de los coches que pasaban por la carretera. La comitiva de Ciudadanos estuvo escoltada por un dispositivo de los Mossos d’ Esquadra en todo momento. Minutos después de que se marcharan, vecinos del pueblo volvieron a colocar los lazos en la misma valla.
“En Cataluña se ha producido una fractura social”, denunció el líder de Ciudadanos al término de la acción reivindicativa en declaraciones a los medios de comunicación, interrumpidas por nuevos abucheos. “Eso es lo que ha conseguido el separatismo, una fractura social. Artur Mas la negaba, Puigdemont la negaba, hasta Torra (actual presidente catalán) la niega. Pero la evidencia es lo que estamos viendo aquí”.
Rivera reclamó al gobierno de Pedro Sánchez que actúe para retirar los símbolos. Lo ha acusado de abandonar a los catalanes por estar aliado políticamente con los líderes independentistas, a consecuencia del apoyo parlamentario que le prestan ERC y el PDECAT: “El pacto de Sánchez con Torra y Puigdemont no puede ser la moneda de cambio para abandonar a los ciudadanos que quieren pasear por sus calles sin ver símbolos ideológicos”.
Ciudadanos se encuentra en una ofensiva para liderar la respuesta política a la ocupación del espacio público que el partido considera que existe en Cataluña. Denunció a la fiscalía la agresión que sufrió una mujer en Barcelona al retirar lazos de la vía pública, y anunció que se dirigirá en amparo al defensor del Pueblo.
Unas 80 personas con la cara tapada retiraron lazos amarillos la pasada madrugada en Girona. El partido defiende, no obstante, que son las instituciones las que deben sacarlos de las calles.
El portavoz del PSOE en el Senado, Ander Gil, acusó a Ciudadanos de “alimentar el conflicto” en Cataluña y apostó por “templar ánimos”. Afirmó que el “ecosistema de supervivencia” del partido naranja es el conflicto y que lo alimenta “constantemente”. “Hay partidos que cuando se acabe el conflicto no sé de qué van a vivir”, añadió.