PERISCOPIO
LA lucha a través de la campaña electoral, ante las elecciones del 2019, tras dignidades seccionales, ya se ha iniciado con bastante fuerza con la presentación de candidatos y precantidatos. Y se vuelve a poner de moda esos juegos un tanto “desleales” dignos, como en el fútbol, de tarjetas amarillas y rojas que debería sacar a relucir ese árbitro conocido con las siglas de CNE, ahora reencauchado por el CPC transitorio. Con exarqueros y distinguidas damas en la contienda, mientras en Guayaquil ya se conoce a los aspirantes en Quito faltan las decisiones finales. EL jueves pasado concluyó la evaluación de las autoridades de control de parte de los “transitorios” dirigidos por Julio César y el viernes comenzó ya la esperada etapa del reemplazo de quienes entraron a laborar bajo el auspicio del correísmo. Luego de haber guillotinado sin compasión, a la manera de Robespierre, a los vocales de entidades enteras, como la Corte Constitucional o el Consejo Nacional Electoral, entre otras, ahora tienen la tarea de reemplazar a treinta funcionarios públicos. Ya hay bastantes ciudadanos inscritos, es decir dispuestos a “sacrificarse por la patria”, lo que obliga a una selección rigurosa y sobre todo “selecta”. LA llegada de Lenín a tierra nipona coincidió con un terrible tifón, de una fuerza que no se había dado en un cuarto de siglo, y un violento sismo, que dejaron víctimas mortales y destrucción. Mientras, por estos lares también tembló la tierra la noche del jueves lanzando a la gente a las calles en desesperado “corre corre”. Estas “movidas” han coincidido con otro sismo que parece estarse dando en la Asamblea en donde la corrupción también ha metido su mano con el cobro que venían haciendo ciertos legisladores a sus asesores, como pago por sus nombramientos.