Evaluación judicial
El Consejo de Participación Ciudadana y Control Social Transitorio- Cpccs (T), presidido por un probo y experimentado jurisconsulto, el doctor Julio César Trujillo, ha venido gozando de un amplio apoyo y confianza ciudadana. Sus actos han sido leales con el pronunciamiento mayoritario que tuvo el pueblo ecuatoriano en la consulta popular del pasado mes de febrero, por ello no deja de causar sorpresa su precipitada decisión de poner en entredicho al Consejo de la Judicatura Transitorio, nombrado por ellos mismos, evitando que cumplan una de sus obligaciones constitucionales y una de las tareas más necesarias y prioritarias que espera el país: la evaluación de jueces y magistrados del Poder Judicial, al existir denuncias de que algunos fueron beneficiados con puntajes gratuitos para que puedan acceder al cargo, y que su comportamiento respondía a influencias políticas del anterior gobierno.
Es posible que al interior del Consejo de la Judicatura Transitorio haya existido una “quinta columna”, pero justamente por esa razón había que darle todo el respaldo a los miembros de ese Consejo, sabiendo de su trayectoria y merecimientos. No creo que el pronunciamiento corporativo de los integrantes de la Corte Nacional de Justicia, de pedir que no se los evalúe en una explicable defensa de sus puestos, sea el motivo para que el Cpccs (T) haya decidido interrumpir un proceso en trámite, en el que incluso se buscaba asesoría internacional.
La excusa de que la evaluación la hará el Consejo de la Judicatura definitivo solo hará ganar tiempo a quienes evitan ser evaluados y permitirá realizar gestiones orientadas
Que la evaluación la haga el CJ definitivo, solo hará ganar tiempo a quienes evitan ser evaluados y ... dejar intocada una administración de justicia, que se requiere con urgencia rinda cuentas’.
a dejar intocada una administración de justicia que se requiere con urgencia rinda cuentas, como un primer paso hacia el logro de que el Ecuador cuente con un poder judicial independiente, que goce de confianza ciudadana, lo cual no acontece en la actualidad, conscientes de que el anterior gobierno le metió la mano a la justicia y eso no puede quedar en el olvido.
Tampoco se puede soslayar que el más alto anhelo de una sociedad es que exista una justicia proba e imparcial.