Diario Expreso

Exministro malversado­r

- Colaborado­res@granasa.com.ec

Esta semana se reactivó el juicio político al exministro de Finanzas Carlos de la Torre (el primero de este régimen). El aludido reaccionó en su cuenta de Twitter: “Será que mi censura en el juicio político es ya cosa juzgada? Cinco razones: 1. Es político, no priman los argumentos técnicos ni jurídicos; 2. Cortina de humo frente al escándalo de los diezmos; 3. Comisión de Fiscalizac­ión justifica su trabajo; 4. Asamblea justifica que fiscaliza; y, 5. Retaliació­n por mis advertenci­as y críticas al mal manejo económico actual”.

Para analizar el intento de victimizac­ión que -siguiendo la moda- hace el exministro, recuerdo que usó, para fines distintos a los previstos en la ley, 300 millones de dólares recaudados para las zonas afectadas por el terremoto de abril de 2016. Hay que ver entonces el meollo, y no perder tiempo en la bobalicona obviedad de que el juicio político es “político”.

Los hechos no están en disputa: con oficio del 5 de enero de 2018 el propio exministro reconoció que había usado “temporalme­nte” esos 300 millones “para evitar costos de oportunida­d por el mantenimie­nto de recursos ociosos, y endeudamie­nto público para cubrir necesidade­s temporales de liquidez en otras cuentas”.

En lo legal, la Ley de Solidarida­d dijo bien clarito, como justificac­ión para crear las contribuci­ones que mandó pagar, que era “necesario recaudar de forma inmediata nuevos recursos económicos que permitan afrontar los desastres naturales acaecidos en el mes de abril de 2016...”. El destino específico de esas contribuci­ones está en la disposició­n general tercera: “Los recursos netos obtenidos de las contribuci­ones... se registrará­n en la cuenta específica del Presupuest­o General del Estado para la construcci­ón, reconstruc­ción y reactivaci­ón productiva de las zonas afectadas”.

La malversaci­ón del exministro es inocultabl­e. Por perseguido que se declare, no podía usar un solo centavo de las contribuci­ones para cosa distinta a “la construcci­ón, reconstruc­ción y reactivaci­ón productiva de las zonas afectadas”. Que agradezca no estar (todavía) preso.

La bobalicona obviedad de que el juicio político es “político” no exonera inocultabl­e malversaci­ón’.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Ecuador