Génesis de la República
Cuando el carrusel de los días se detiene en fechas claves y en ocasiones, a nuestro juicio, no claramente dimensionadas, nos hacemos preguntas y reflexionamos sobre nuestra historia escrita y las verdades que resalta y oculta.
Con desesperación en ocasiones surge desde nuestro Ministerio de Educación, un inusitado entusiasmo por el quichua y por la exaltación de eventos de nuestras culturas precolombinas: el Pawkar Raymi, Inti Raymi, Kulla Raymi y Kapac Raymi por ejemplo, pretendiendo su nacionalización sin caer en cuenta que el inca colonizador no alcanzó a extender sus dominios hacia la zona de los reinos costeños, que no hablaron el quichua, que no permitieron el paso del imperio invasor y que conservaron sus costumbres y culturas hasta la llegada de los españoles y, por el contrario, fechas como el 9 de Octubre de 1820, germen de la República, pasan a ser recordadas solamente como una gesta independentista local.
Cómo quisiéramos que ese mismo entusiasmo oficial que se pone ante lo precolombino se vierta también sobre los orígenes ciertos y reales de la República del Ecuador, que tiene como gran obertura la gesta guayaquileña, que constituye Estado, que genera Constitución, que arma ejército libertario para subir a los Andes e independizar Quito, que presupuesta, que al grito de Guayaquil por la patria, legisla y establece nexos consulares y que en definitiva, se muestra como nación, como “la primera república”.
No es negando la presencia española ni las gestas costeñas como nos volvemos más auténticos, es sumando las culturas, costumbres y tradiciones como seremos mejores ecuatorianos. Si no que lo diga Europa, que tendría que renegar de todos los imperios que pasaron por sobre ella.
Rescatemos el 9 de Octubre de 1820 como génesis de la República, que el Ministerio de Educación actué, que la Municipalidad de Guayaquil haga lo suyo para que ante la patria quede claro el rol de la gesta octubrina y de los hombres que con José Joaquín de Olmedo hicieron patria e hicieron camino para el nacimiento del Ecuador con la Provincia Libre de Guayaquil.
No es negando la presencia española ni las gestas costeñas como nos volvemos más auténticos’.