DAVID SMOLANSKY “Es fundamental declarar una crisis de refugiados”
− ¿Cómo analiza la expulsión de la embajadora venezolana en Ecuador? − Es muy importante que Ecuador se sume a la mayoría de países de la región que han denunciado que en Venezuela hay una dictadura, que hay una violación masiva a los derechos humanos, que hay una crisis humanitaria, una crisis migratoria. Si en Venezuela sigue habiendo un régimen autoritario, eso no solo perjudica a los venezolanos sino a los latinoamericanos, incluyendo a los ecuatorianos. Lo que argumentó el ministro Jorge Rodríguez no es el sentir de los venezolanos. − El punto del impasse es la cifra de migrantes. El presidente Moreno habló de 6.000 venezolanos al día que llegan a Ecuador, ¿es la cifra que ustedes como grupo manejan? − Nos guiamos por cifras oficiales. Evidentemente que en Ecuador hay un flujo migratorio importante a raíz de que en Colombia hay más de un millón de venezolanos. Si bien es cierto que están asentados, no es menos cierto que muchos toman la decisión de irse a otro país y una opción es Ecuador. − ¿El hecho de que los venezolanos no tengan hoy un representante de su país en Ecuador puede afectarlos? − Confiamos en los esfuerzos del presidente Moreno para darle atención y protección a los migrantes y refugiados. Confiamos en que ellos puedan insertarse a la sociedad. Esto está por encima de la expulsión de la embajadora. − ¿Cómo darle solución a la migración venezolana? − Hay que entender que la mejor solución es que en Venezuela haya democracia. Cuando eso suceda, evidentemente, el éxodo se va a frenar y no solo eso, habrá incentivos para que millones vuelvan. Mientras esto dure es importante enfrentar la crisis de los refugiados. − ¿Enfrentarla cómo? − Que haya criterios similares, acuerdos mínimos para darles atención. Que se gestionen recursos que permitan darle una atención al migrante y refugiado. Hemos detectado ocho áreas de atención: alimentación, salud, educación, capacitación, infraestructura, asistencia legal, vestimenta, esparcimiento sobre todo para los menores de edad. − De los países del continente que reciben a los migrantes, ¿Ecuador en qué lugar está? − En primer lugar está Colombia, que registra el millón de venezolanos. Estados Unidos con unos 750.000. Perú está por los 450.000, seguido de Chile con una cifra similar. Le sigue Argentina y luego Ecuador en el sexto lugar, con 250.000. Son cifras oficiales. Estamos conscientes de que las cifras pueden ser mayores porque muchos utilizan las llamadas trochas y entran a otros países sin ser registrados. − Los migrantes, más los que ingresan de forma irregular, son propensos a caer en la trata de personas, xenofobia, explotación laboral y más. ¿Tienen reportes de aquello en Ecuador? − Tenemos reporte a nivel de la región. Más allá de que haya o no habido alguna manifestación xenofóbica es importante que los gobiernos locales y la sociedad civil organizada hagan manifestaciones contra la xenofobia. A ese monstruo no hay que dejarlo crecer. Hemos tenido denuncias de deportaciones, abusos sexuales, trata de personas y algunas manifestaciones xenofóbicas y es algo que queremos que disminuya. − Parte del trabajo del grupo es presentar recomendaciones a los países, ¿de qué tipo de recomendaciones hablamos y en qué plazo las tendrán listas?
EL CONTEXTO La oleada de migrantes venezolanos preocupa a los países de la región. La OEA creó un grupo de trabajo para que observe y redacte recomendaciones para las naciones. David Smolansky conversó con EXPRESO en una semana en la que la relación entre Ecuador y Venezuela empeoró por un comentario sobre la diáspora. La cifra que manejamos es que hay 250.000 venezolanos en Ecuador y seguirán llegando. Tenemos la idea de visitar los países que más reciben venezolanos y una prioridad es Ecuador.
− Esto lo estamos trabajando para finales de 2018, inicios de 2019. Sobre las recomendaciones, creemos que están dadas todas las condiciones para declarar una crisis de refugiados y lo justifica la Declaración de Cartagena de 1984. Lo que quiere el grupo es describir y evidenciar aún más las razones por las que millones de venezolanos se han ido en contra de su voluntad. En segundo lugar, describir la situación en los países que los están recibiendo, actualizar cuántos son, dónde están ubicados y, por último, a través de las recomendaciones impulsar políticas para mejorar la atención y protección a los migrantes y refugiados. Es fundamental un criterio uniforme de regularización migratoria, incorporar a los gobiernos locales, regionales, sociedad civil organizada en una campaña en contra de la xenofobia. La región debe entender que esta es la peor crisis migratoria que se ha registrado en la historia de América Latina.