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Hacemos dieta y ejercicios y nos sentimos felices cuando al subir a la báscula notamos los resultados, ¿pero por qué esa barriguita de pesadilla sigue allí?
Deshacernos de un vientre abultado parece una misión imposible. Seguramente ese pantalón que tenía guardado para probar si realmente bajó de peso volvió a subirle en la zona de los muslos, pero en la parte del abdomen no quiere cerrar. Hay algo que está haciendo mal y no son precisamente los abdominales. ¿Se ha detenido a pensar que algún hábito o alimento sería el causante de esa pesadilla?
Eso sí, no olvide que hay momentos en que esa hinchazón puede ser indicio de algo más. Si es mujer, el perímetro de la cintura no debe ser mayor a 88 cm y si es hombre, no debe superar los 102 cm ¿Por qué? Tener más de esos rangos hace que el riesgo de sufrir de enfermedades cardiovasculares o de diabetes aumente hasta tres veces. Y no importa si está en su peso normal.
Conozca entonces cuáles son los siete culpables de ese voluminoso vientre y descubra si uno de ellos le está dañando su figura. Ser intolerante a los lácteos parece estar de moda. Hay quienes toman un vaso de leche o comen queso y a los segundos sienten hinchazón. Los científicos no terminan de ponerse de acuerdo sobre si los humanos debemos consumir o no este producto animal. Intente con alimentos sin lactosa o con las leches de soya y de almendra para ver si su vientre se reduce. retienen más líquido, según el Centro de Digestivo de la Mujer en Washington. En la ovulación, los ovarios producen más progesterona y eso genera que los músculos abdominales se relajen, al igual que el suelo pélvico. Pero es algo que dura solo unos días y luego su vientre regresa a la normalidad.