La mujer afro, entre la identidad y la comodidad
Aunque se sienten orgullosas de su cabello, la mayoría opta por nuevos peinados por moda ❚ El entrenzado se ha vuelto una fuente de ingresos en los barrios
La mujer afro, como cualquier fémina, busca estar al día en la moda. Y para lograrlo debe lidiar con el cabello zambo, que forma parte de su identidad étnica.
En la actualidad existen varias alternativas para lograr ‘dominarlo’ y arreglarlo como deseen. El uso de extensiones naturales o sintéticas se vuelve frecuente, intentando seguir las tendencias internacionales que se observan en series y programas de TV y que marcan los estilos.
En los sectores mayoritariamente poblados por personas afro, es muy común encontrar mujeres dedicadas a elaborar y colocar trenzas de cabello sintético. Yaneth Nazareno es una de ellas. Aprendió a elaborar los trenzados hace 20 años y trabaja en su domicilio.
Según Nazareno, hacer estos peinados, más que una moda, es una manera de lograr mayor comodidad, en especial entre las jóvenes. Y es una forma de ayuda porque a través del trenzado logran que el cabello crezca, recordando que el pelo les crece hacia arriba y no más de 5 centímetros de alto.
En los años 70 del siglo pasado se popularizó el estilo afro. En esa época, todos querían tener cabello zambo para dejarlo crecer y estar a la moda, tanto varones como mujeres.
EL DETALLE Frase. Existe una típica frase que se escucha entre las mujeres al ver a una afro con extensiones de cabello: “¿Ese pelo es tuyo o es prestado?”. “Es mío porque lo compré”, es la respuesta. BELLEZA
“Como el cabello de nosotros es esponjoso, el sintético nos permite poder arreglarnos más rápidamente, lo que resulta muy práctico. A nuestro cabello natural debemos desenredarlo y eso toma su tiempo”, indicó la estilista Nazareno.
La utilización del trenzado no debe sobrepasar los dos meses aproximadamente, porque cuando se excede ese tiempo el cabello propio de la mujer tiende a enredarse y se sueltan las trenzas, lo que implica arrancar su cabello; aparte de que al no secarse bien pueden producirse olores desagradables. Por ello, las conocedoras y estilistas recomiendan secarse el cabello con secadoras luego de lavarlo, para evitar eso.
Lo relatado ocurre no solo en el país sino a nivel mundial. En Ecuador hay polos de asentamientos afro donde estas prácticas estéticas se siguen asiduamente, como son Esmeraldas, las provincias de Imbabura y Carchi, así como en las grandes ciudades, donde la migración los