Tras tres años de archivo, la Fiscalía retoma diligencias en el caso Manduriacu
La entidad solicitó el testimonio del exdirector de Odebrecht en el país
Al igual que su antecesor, Paúl Ponce, la fiscal general del Estado, Ruth Palacios, empezó su gestión reaperturando emblemáticos casos relacionados a la corrupción en los procesos de construcción de obras públicas.
La más reciente es el caso de sobreprecios en la construcción de la central hidroeléctrica Manduriacu, a cargo de la empresa brasileña Odebrecht, y que pasó a costar de $ 124,8 millones a $ 227,3 millones.
Tras tres años archivado, Palacios retomó diligencias, entre ellas la suma al expediente de los decretos ejecutivos por los que se designó a Jorge Glas como ministro coordinador de Sectores Estratégicos, una certificación con el audio del testimonio anticipado de José Conceição Santos, exdirector de Odebrecht en el país, y delator principal sobre la entrega de coimas en el sector público, y los documentos suscritos por el exvicepresidente, hoy preso, con la finalidad de obtener financiamiento para la construcción de la hidroeléctrica. Estos deberán sumarse al proceso hasta máximo mañana.
El 12 de diciembre pasado, la Fiscalía ordenó cuatro peritajes de contratación pública, ingeniería y contabilidad a la suscripción de contratos complementarios de la edificación de la hidroeléctrica, que se analizan para determinar si existe un supuesto peculado.
La Comisión Nacional Anticorrupción aplaudió la medida en sus redes sociales, celebrando que la entidad continúe el proceso. Los miembros de la comisión denunciaron los supuestos sobreprecios en 2015, pero la denuncia fue calificada como mentira por parte del gobierno del expresidente Rafael Correa. La comisión indicó, además, que la Fiscalía también debe continuar la investigación de otros casos pendientes como el campo Singue.