La tilapia gana espacio en Puerto Bajaña
Asado o frito, el pescado favorito de quienes visitan el balneario
El establecimiento de Joel Vizcarra se convierte día a día en uno de los más visitados por lugareños y turistas, gracias al exquisito platillo que ofrece. En el local y en todo Puerto Bajaña, la tilapia frita es el plato estrella de su gastronomía.
Por más de dos décadas este manjar ha identificado a la localidad rural de la provincia de Los Ríos. A tan solo 15 minutos a pie, desde el centro del cantón Buena Fe, este balneario de agua dulce atrae también por sus encantos naturales.
Vizcarra, un promotor turístico de este lugar, ofrece a todos los visitantes el mencionado pez de agua dulce acompañado de patacones y ensaladas.
Una de los detalles por los que los comensales visitan su local, asegura el promotor, es la “sazón diferente”. También lo atribuye a que el agua de su criadero emana de una vertiente natural, “y eso permite que los peces se mantengan frescos hasta el momento de llevarlos a la paila”.
Luego recuerda que no ha sido fácil salir adelante en Puerto Bajaña. Hubo necesidad de trabajar arduamente desde 1992, cuando la población inició sus actividades turísticas. Desde entonces, junto a Gilberto Paredes, Vizcarra se empeñó en convertir al sitio en un referente turístico del cantón, “lo cual se fue consiguiendo conforme el tiempo pasaba”.
Actualmente el sitio es visitado por turistas de todas partes del país, en especial de la serranía. Los fines de semana es uno de los lugares más concurridos para la sana recreación de los buenafesinos.
Entre los habitantes se comenta que por los años 90, el río Baba era un afluente que servía para el traslado de las embarcaciones de caña que cruzaban por el sitio. Como en el lugar existía una hacienda que pertenecía a un señor Bajaña, la gente comenzó a identificar al sitio como Puerto Bajaña.
En la zona existen otras leyendas. Una muy conocida habla de la aparición de una mujer en una piedra del río, que se bañaba a partir de las 18:00 con un vestido blanco. “Una vez la vi, era esplendorosa y me decían que todo aquel que la veía moría o nunca más se aparecía por la zona, pero eso no pasó conmigo y más bien me enamoré de este puerto”, refirió Vizcarra.
LA FRASE No hay que viajar a otras ciudades para disfrutar en familia y degustar de la rica comida del lugar.