Siempre dejar espacio para dialogar con la familia, apagando el celular
Uno de los momentos en que toda la familia se puede reunir es en la mesa, sea el desayuno, el almuerzo o la cena. Se supone que es un momento para dialogar otros temas, reírse si es necesario. Pero ¿qué pasa cuando alguien quiere dañar o cambiar ese momento ameno con un tema pesado o peor aún observar a alguien usando el celular, que pasa en varias ocasiones? Al recordar la trilogía de El Padrino se pueden mencionar frases icónicas de don Vito Corleone; interpretado por Marlon Brando, por citar una de las frases que me llamaron la atención “No hablamos de negocios a la mesa”. La frase en sí nos dice que la mesa es un momento para estar tranquilos. Es inevitable tocar temas que suceden dentro del ámbito laboral en la hora de la comida; es un desahogo ya que estás con tu familia, pero sí considero que este espacio es un momento para dialogar y no se debería estar revisando el celular durante todo el tiempo allí. Aprovechando que hay vacaciones escolares, fin de semestre en la universidad y ya no existe esa presión de estar apurados para hacer deberes, sería bueno que los padres aprovechen y conversen con ellos, no teman dialogar con sus hijos y tampoco los callen con “están pequeños para opinar” eso sí suele dañar ese momento ameno.
Tnlgo. Carlos Cordovez de la Gasca