La justicia y el reto de dejar atrás los errores del pasado
El nuevo CPCCS encontrará autoridades del sistema de justicia ya designadas ❚ Analista considera que si no hay independencia se repetirá la década pasada
La justicia fue una herramienta de persecución. Por una década, la Función Judicial estuvo, casi en su totalidad, en manos de funcionarios que se alinearon a los designios del Gobierno anterior. En esto fue clave la acción del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social (CPCCS) que antes era seleccionado desde el Consejo Nacional Electoral (CNE) y el 24 de marzo será elegido por votación popular.
Desde el CPCCS se designó al Consejo de la Judicatura (CJ) encabezado por Gustavo Jalkh, que fue cesado por falta de independencia de la Función Ejecutiva, entre otras irregularidades, según el informe de evaluación del Consejo de Participación transitorio.
La justicia es una de las más golpeadas por las acciones del Consejo de Participación. La han empezado a reconstruir.
La Judicatura, a su vez, es la encargada de los concursos para la Corte Nacional de Justicia (CNJ) y los jueces de primer nivel, muchos de los cuales enfrentan ahora demandas por su actuación en los juicios por la revuelta policial del 30 de septiembre de 2010, que dejó varias personas procesadas y sentencias. Algunas, con pruebas “forjadas”, según los denunciantes.
“En los Consejos de Participación anteriores no se hacía nada que contradiga al gobernante de la época y eso también impactó gravemente en el sistema de Justicia”, considera el jurista Vladimiro Álvarez Grau.
El CPCCS tiene además a su cargo la elección de una figura clave: el fiscal general del Estado, función que no ha estado exenta de polémicas con la designación primero de Galo Chiriboga, tío del expresidente Rafael Correa, y luego de Carlos Baca Mancheno, un hombre cercano al exmandatario, que dejó el cargo en medio de un escándalo por la difusión de unos audios.
Actualmente, el Consejo de Participación transitorio lleva adelante el concurso para seleccionar al fiscal general. Para el presidente de este organismo, Julio César Trujillo, es la designación más importante, “casi al nivel del presidente”, según le dijo a EXPRESO.
“Por eso hemos tomado todas las precauciones para que las personas que avancen en las diferentes fases sean los mejores ecuatorianos y no pase lo que antes”, añadió Trujillo.
Pero incluso el Consejo transitorio ha tenido sus tropiezos a la hora de encargar la administración de la justicia. El Consejo de la Judicatura temporal, liderado por Marcelo Merlo, se enredó en una disputa interna que muchos atribuyeron a un nuevo intento por “tomarse” la justicia, lo que provocó que su nivel de credibilidad toque fondo, al punto de que no pudo empezar la evaluación a la CNJ.
En manos del CPCCS también está la designación del defensor público y el procurador general del Estado, que sale de entre las ternas que son enviadas por el presidente de la República.
La Corte Constitucional (CC), que también fue cesada por su cercanía con la administración anterior, está en manos del Consejo de Participación. El organismo ya queda conformado y el nuevo CPCCS, en teoría, ya no puede hacer nada por el momento hasta la renovación parcial del organismo, prevista para dentro de tres años.