Corrientes fallidas y la realidad del país
esos que se autodenominan “héaroes
de la patria” y que viven en otro continente, no los entiendo. Es decir, si realmente están convencidos del bien que le hicieron al país y a la Historia, deberían dejar que la misma los absuelva y les dé la razón. No sé si soy el único, pero verlos en decadencia, intentando volver a los cargos públicos y llegando a las urnas con un partido político cuyo máximo líder es cuestionado por muchas irregularidades, investigado por la justicia, y fue abandonado por su misma gente, me parece un acto de desesperación.
¿Será que intentan con todo fervor volver a las alcaldías, ministerios, prefecturas y demás para cortar cabos sueltos? Yo realmente creo que estas situaciones deben tenernos alerta a todos los ecuatorianos.
No es necesario tener que llegar a discusiones internas de si votar por la izquierda o por la derecha, tan solo es necesario ver dónde está nuestro país, identificar quién lo ha llevado a ese punto e identificar dónde queremos ver al Ecuador.
A mi criterio, este es otro de los problemas que tenemos, hay políticos que dicen ser izquierdistas y no tienen intención alguna de perseguir luchas sociales que beneficien al pueblo; y también hay esos políticos que dicen ser de derecha y que, en lugar de buscar cómo generar inversión, trabajo y desarrollo, buscan beneficios personales y oligárquicos.
A casi un mes de las elecciones seccionales, todos deberíamos meditar un poco más nuestro voto, quitarnos los estigmas de las corrientes políticas y los sistemas que han fracasado a lo largo de la Historia, y sentarnos a analizar un poco más la humanidad de los candidatos.
Emilio Félix Romero