Safadi plantea construir un paso peatonal de 10 kilómetros
La obra será para La Puntilla ❚ Paralelamente apunta a edificar un parque industrial ❚ Expertos analizan si son viables las propuestas
Aunque no concibe cómo Samborondón, siendo un cantón ganadero, no pueda contar todavía con un camal, una obra que le parece urgente y que incluye entre sus principales propuestas; Andrés Safadi, candidato a la alcaldía de Samborondón por el movimiento SUMA (lista 23), se inclina inicialmente por trabajar en la construcción de un paso peatonal elevado que cruzará los 10 kilómetros de extensión que mide la parroquia urbana La Puntilla.
“Son 10 kilómetros grises por los que es imposible transitar, ya sea por las trabas en vialidad, o la falta de sombra y de aceras bien construidas”. Por eso plantea levantar un puente que se ubicará sobre el parterre central y se conectará con los pasos ya levantados en el sector (uno terminado, dos en construcción) y los erigirá en otros puntos conflictivos.
EL DETALLE El candidato. Plantea además crear la Corporación de Pequeños Arroceros de Samborondón. VOCES HÉCTOR HUGO, urbanista y docente de la Universidad de Guayaquil
Con la obra, que tendrá además un jardín aéreo colgante con el que busca darle “algo de color” al sector y cuyo tiempo de construcción será de dos años, Safadi pretende evitar los embotellamientos. Como los habitantes ya no circularán por la avenida -piensano habrá necesidad de tener semáforos. Es así que los quitará y en su lugar habilitará carriles de retorno cada kilómetro, a fin de que los autos circulen con fluidez.
El candidato no da cifras sobre el costo que tendrá la obra, puesto que “variará según los planos y el modelo definitivo que el paso tenga”. Y aunque de los 50 millones fijados del presupuesto municipal destinará “lo que sea necesario”, su objetivo es financiarla, en su mayoría, con el aporte de la empresa privada.
Para Johnny Cóndor, especialista en planificación urbana, la construcción de este puente, aunque llama la atención, sobre todo porque existen en las más grandes potencias, en países como Hong Kong, no refleja ni va acorde con la realidad del entorno.
“Es una oferta futurista, magnífica, pero lamentablemente di- fícil de desarrollarla aquí y ahora”. Y no solo porque requiera de una inversión superior a los 70 o 100 millones de dólares, sino porque se truncaría en algunos tramos, como en el kilómetro 3,5, donde existe un paso a desnivel hace poco inaugurado.
Con todo ese dinero, que será difícil de conseguir, estima, se podría hacer muchos otros proyectos. Más pasos peatonales, por ejemplo, pero no bajo esas características; una vía de acceso alterna y una reestructuración total a las veredas, que por la cantidad de mobiliario urbano que poseen, dificultan el paso al adulto mayor y a las personas con discapacidad.
Daniela Hidalgo, arquitecta y catedrática de la Universidad de Especialidades Espíritu Santo, tiene una opinión similar. Si bien para ella este puente podría ejecutarse siempre que exista el presupuesto que, coincide, sería bastante fuerte; considera que sería más viable si la obra es replanteada.
“Para darle seguridad al peatón, el paso no necesariamente debe ser continuo, sino que podría estar enlazado solo en los tramos más transitables”. El resto podría ayudarse de pasos cebra y semáforos, sentencia el planificador urbano Héctor Hugo, al recalcar que eliminarlos sería una medida socialmente inaceptable y “antitécnica”.
Si quieren que en La Puntilla de una vez por todas se reduzcan los embotellamientos, acota, es vital crear una red de transporte integral, que incluya la movilización a través del río. Safadi lo tiene claro. Por ello también ofrece mirar hacia este punto para promover el uso de lanchas y canoas que se conecten con las 198 ciudadelas, incluso para activar el turismo.
Pero existe una obra adicional que, de resultar electo, la ejecutaría asimismo en un plazo de dos años y con la contribución de la empresa privada. Se trata de la creación del primer parque industrial en Samborondón, que estará ubicado a la altura del recinto Barranca y con el que piensa dotar de empleo a 5.000 personas aproximadamente.
Serán 250 empresas las que allí se asentarán y cada una, según lo fijará en una ordenanza, deberá contratar a un mínimo de 20 samborondeños, promete.
La comunidad y los expertos ven con buenos ojos la gestión. “Aquí, tanto o más que un hospital, un camal o una planta de tratamiento, hace falta trabajo. En los recintos del cantón no hay en qué aplicar, nuestra única opción es dedicarnos a la informalidad, ganando sueldos paupérrimos”, señala Gastón Morocho, habitante de Barranca.
Eso sí, sugiere Hidalgo, habrá que tomar en cuenta el impacto ambiental. “Saber dónde descargarán las aguas servidas será vital para no dar cabida a nuevas afectaciones”. Ni tampoco espantar a las especies, sobre todo aves, que en el lugar habitan, reflexiona.
La construcción del paso no es lo recomendable. Este sirve pero en ciudades densamente pobladas, donde la obra es su única opción. Aquí no cabe. El levantamiento del paso sí podría resultar. Estéticamente se vería bien y además permitiría al habitante caminar. Hacerlo por extensiones largas, amigables y seguras. JOSÉ VERA, jubilado y habitante de la cabecera cantonal Nos hace falta tanto, sobre todo un hospital. La gente de los 120 recintos se muere. Y muchas veces porque no alcanza a llegar ni a los sanatorios de La Puntilla. PRÓXIMA ENTREGA
Un análisis de la propuesta de este candidato a la alcaldía de Samborondón.