Hacia un nuevo ciclo político
Quito y Guayaquil escogerán a dos nuevos alcaldes para liderar su administración Es la primera elección de autoridades seccionales luego de la fractura del correísmo
RELEVOS.
EL DETALLE Antecedente. La consulta popular del 4 de febrero de 2018 fue el último proceso. Luego de las elecciones de mañana, en el año 2021 serán las presidenciales. CAMBIO.
Las urnas hablarán. A las 17:00 de mañana, los más de 13 millones de votantes ecuatorianos habilitados para sufragar habrán tomado una decisión sobre el rumbo de sus ciudades y provincias. También sobre el destino del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social, pues la elección de sus siete miembros reviste un manto de incertidumbre por el alcance que pueda tener el voto nulo.
Lo cierto es que las dos principales ciudades del país, Quito y Guayaquil, renovarán a sus timoneles. El alcalde guayaquileño, Jaime Nebot, deberá entregar en mayo próximo la batuta a su sucesor o sucesora en el cargo, cerrando así un ciclo de 18 años y 9 meses consecutivos como primer edil porteño. Lo mismo hará el alcalde quiteño, Mauricio Rodas, quien pese a estar facultado legalmente para presentarse a la reelección prefirió no hacerlo, frente a un porcentaje de aprobación desfavorable.
También será la primera renovación de autoridades de la era poscorreísta. Los primeros comicios en una década en los que un presidente no utiliza el aparato estatal para empujar a sus candidatos. Y los primeros en los que el movimiento Alianza PAIS debe enfrentar una elección dividido y con un exlíder en el exterior haciendo campaña por sus coidearios, ahora arropados con la bandera de otro movimiento político.
Será además el primer proceso electoral en el que regirá la prohibición de la reelección indefinida para las autoridades seccionales, luego de que se estableciera la figura en la Constitución de 2008, se eliminara por enmienda constitucional y se volviera a restablecer en la Carta Magna por la vía de la consulta popular el 4 de febrero de 2018.
Los ecuatorianos regresan a las urnas luego de 13 meses. Los primeros en ejercer su derecho al voto fueron los privados de la libertad sin sentencia condenatoria ejecutoriada y ayer les tocó a las personas beneficiadas del programa Voto en Casa. A 784 votantes mayores de 65 años de edad y con una discapacidad física igual o mayor al 75 %, a nivel nacional, les llevaron las urnas hasta sus viviendas.
Uno de los primeros en ejercer ese derecho en Guayaquil fue el ciudadano Jorge Eduardo León Hernández, de 73 años, quien habita en la primera etapa de la ciudadela Alborada. El vicepresidente de la República, Otto Sonnenholzner, y la presidenta del Consejo Nacional Electoral, Diana Atamaint, presenciaron el hecho.
Diana León, hija del votante, comentó que desde el día anterior tenía lista su ‘polla’