Los autos usados abren grietas en el control aduanero
El Senae investiga, con apoyo de EE. UU., las importaciones para personas con discapacidad ❚ 18 vehículos están retenidos
El ingreso fraudulento al país de vehículos de lujo exonerados de impuestos al comercio exterior sigue dando dolores de cabeza a las autoridades aduaneras.
Tal como ocurrió en años pasados con las dolosas entradas de carros de diplomáticos o como parte de menaje de casa por parte de migrantes, esta vez las alarmas se han encendido sobre la internación de autos usados de alta gama para personas con discapacidad.
La Aduana activó las alertas en octubre de 2018 y empezó a hacer seguimientos a esas importaciones, que son libres de tributos. Según datos de la entidad, mientras en el primer semestre de 2018, se importaron 330 automóviles, nuevos y usados, en los primeros seis meses de este año fueron 1.694.
El 88 % de la importación en 2019, correspondiente a 1.491 unidades nuevas, fue traído por empresas concesionarias, y el 12 % restante (203 carros) tramitados directamente por personas con discapacidad, a través de agentes de aduanas.
Los 1.694 automóviles importados en el primer semestre de este año superan en número, incluso, a lo que ingresó en todo el año 2018, que correspondió a 1.639 vehículos.
El inusual incremento del 400 % registrado entre ambos periodos, llevó al Servicio Nacional de Aduana del Ecuador
(Senae) a abrir una investigación a mediados de mayo pasado, con la presunción de que estaban ingresando carros de forma fraudulenta.
Lo confirma a EXPRESO, la directora del Senae, María Alejandra Muñoz (ver entrevista), quien reconoce que el problema para los controles está en la importación de carros usados gestionada por personas con discapacidad.
La funcionaria revela que, a julio de este año, en el puerto de Guayaquil se han detenido 18 vehículos, cuyos beneficiarios presentaron facturas de compra irreales. “Presumimos que hay una asociación de gente que utiliza a las personas con discapacidad para que importen vehículos que realmente cuestan más de lo que dice la factura, es decir, están subvalorados”, detalla la funcionaria.
Según la Ley de Discapacidades, una persona con discapacidad puede importar para su uso personal un vehículo exento de tributos, cuyo precio FOB (puesto en el puerto de embarque) sea hasta de un monto equivalente a 60 salarios básicos unificados. Es decir, por debajo de 23.640 dólares.
El Senae investiga sobre las importaciones realizadas para este tipo de autos, cuya mayoría proviene de Estados Unidos. En este trabajo colabora la Oficina de Aduanas y Protección de Fronteras de Estados Unidos (CBP, por sus siglas en inglés). Tres funcionarios de ese organismo perfilan riesgos de valoración en el puerto de Guayaquil.
Mercedes Benz, BMW, Audi y Chrysler, en variados modelos, son las marcas de autos de segunda mano preferidas para traer al Ecuador, de acuerdo con el registro de importaciones de este año, al que tuvo acceso este Diario.
Para la directora del Senae se torna necesario en el país revisar la normativa relacionada con la importación de vehículos usados y mejorar los controles en el proceso de otorgamiento de los carnés de discapacidad.
En el Ecuador, 1.859 personas con discapacidad son beneficiarias del identificativo vehicular, de acuerdo con estadísticas del Consejo Nacional para la Igualdad de Discapacidades (Conadis).
Según ese organismo, el carné de discapacidad es otorgado únicamente luego de efectuar los respectivos procedimientos e instrumentos técnicos aplicados por un equipo calificador del Ministerio de Salud Pública (MSP), a petición por parte del interesado o de la persona que la represente o que esté a su cargo.
El Ministerio de Salud, la autoridad nacional encargada