Cruzar la transitada vía a Salitre es ‘jugarse la vida’
A lo largo de al menos siete kilómetros no hay semáforos, pasos peatonales ni cebra ❚ Los habitantes tardan entre 15 y 25 minutos en atravesar la avenida
La falta de semáforos, señalética y pasos peatonales en la vía a Salitre, ha convertido una acción tan simple, como es el hecho de cruzar la calle, en una misión prácticamente imposible. Y hasta mortal, a decir de los residentes.
En el sector, desde la intersección de la avenida León Febrescordero hasta la urbanización Los Prados, por donde circulan cientos de vehículos y en cuyos casi siete kilómetros se levantan al menos 13 urbanizaciones, dos farmacias, tres centros educativos y tres plazas comerciales, según lo constató ayer EXPRESO, no hay más que dos agentes de tránsito intentando ayudar a los peatones, aunque no es suficiente.
“Este es el calvario de todos los días. Me arrepiento de vivir aquí”, se quejó Soledad Piedra, de la ciudadela San Antonio, quien por residir en el punto más crítico de la carretera -donde se encuentra el distribuidor de tráfico que conecta a Salitre con Samborondón- demoró 23 minutos en atravesarla.
A decir de los residentes, si bien en horas pico (de 06:00 a 08:00; de 12:00 a 14:00; y de 18:00 a 20:00) es cuando el problema se agudiza; este se lo percibe a lo largo del día y durante toda la semana.
“Estamos rodeados de negocios a los que no podemos llegar porque cruzar 4 o 5 tristes metros, implica el mismo tiempo que irte en carro hasta La Aurora e incluso hasta La Puntilla. No hay nada aquí y no hay autoridad que se preocupe por ello”, sentenció Amayris Zavala, quien vive en Cataluña hace 6 años y debido a las molestias ha puesto en venta su casa.
Hace dos semanas, la también residente Celinda Alvarado ya se refirió al tema en una asamblea comunitaria a la que, con el fin de ejecutar acciones, fueron invitadas las autoridades, entre ellas el gobernador de la provincia del Guayas, Raúl Ledesma.
“Aquí nos vemos obligados a entregar la vida ante la falta de semáforos”, advirtió, haciendo hincapié en que solo al pie de la iglesia Santo Tomás, en el kilómetro 11,5 (cerca del intercambiador), solo entre sábado y domingo son en promedio 1.000 las personas que asisten al templo y corren entonces el riesgo de ser atropelladas o atropellar a los feligreses.
Ante tal situación, hay quienes optan, pese a vivir cerca, a desplazarse hacia otras capillas. “Hace dos semanas vi cómo atropellaron a un hombre en plena vía. Pude ser yo el afectado o quien lo provoque. Y es que nunca hay agentes, nunca hay nada, caminamos a ciegas, en una especie de campo minado”, lamentó la residente Mariuxi Acevedo, de Bona Terra, quien aseguró además que en las noches, debido también a la escasa iluminación del entorno (hay tramos oscuros), el problema se complica.
“Seguimos perdiendo vidas y solicitando ayuda, pero nadie nos escucha. No sé por qué está pasando esto”, añadió Alvarado.
Sobre el tema, el presidente de la Federación de Urbanizaciones y Organizaciones Barriales de La Aurora, Mario Chang, confirmó a EXPRESO que además de Ledesma, el gremio solicitó respuestas a Wilson Cañizares, alcalde de Salitre, quien les comunicó que se harían estudios para verificar dónde se podría levantar un paso peatonal.
“Sabemos que este año iniciará la construcción de dos en la avenida León Febres-cordero, donde no hay ninguno. Sin embargo esta zona también lo necesita. Si no la hacen, se deberá colocar por lo menos un parterre central que proteja a los transeúntes”, estableció Chang, al asegurar que desde que se amplió el primer tramo de la vía (ahora de 4 carriles), la inseguridad ha aumentado.
Sin embargo la decisión de ejecutar obras, cualquiera que sea, a decir del primer edil, no es tan fácil como parece, ya que la concesión de la arteria está en manos de Conorte (Concesionaria de las vías del Norte del Guayas). “Por eso vamos a pedir la competencia...”, dijo ayer, adelantando que para hoy está prevista una reunión con los directores de la empresa para hablar al respecto.
Pero mientras eso se da, las familias exigen cambios.
“No podemos esperar más. Queremos salir, caminar, andar en bicicleta. Está claro que faltó planificación. Mas ese error, no podemos seguirlo pagando nosotros y con la vida. Están aniquilando uno de los polos en desarrollo más importante del Gran Guayaquil”, advirtió Keiko Paredes, residente.
Al respecto, este Diario solicitó a la Comisión de Tránsito del Ecuador una entrevista con su director, para conocer el número de siniestros ocurridos en el sitio y las medidas que se tomarán para salvaguardar a los habitantes; pero desde el Departamento de Comunicación se nos confirmó que esta será atendida hoy.