Cuatro décadas de arte politécnico
El grupo de teatro de la Espol celebra 40 años ❚ Lo integran 22 personas ❚ Su obra de aniversario trata las pandillas juveniles
El auditorio de teatro de la Escuela Superior Politécnica del Litoral (Espol) abre sus puertas pasadas las 17:00. Es un día particular y decenas de estudiantes llegan al espacio con ropa cómoda y entre sus manos portan libretos.
Junto a ellos se incorporan músicos y profesores, quienes acordaron el encuentro a través de las redes sociales de este centro de estudios. Hay unos que entonan sus cantos y guitarras mientras que otros no dejan de repasar sus textos.
Así transcurre una tarde y noche de ensayo del grupo de teatro de la Espol, compuesto por 22 personas. Sin embargo, este no es un ensayo cualquiera, es donde los integrantes dan los últimos cambios para la obra ‘¿Aló?, una llamada inesperada’, por motivo de conmemorar el aniversario 40 del grupo que se celebra mañana.
Con este trabajo los estudiantes quieren transmitir un mensaje positivo a la comunidad y alejar a otros jóvenes de vicios y pandillas. “No queremos que los chicos sigan una secta religiosa, sino mostrar cómo a través de Jesús se puede cambiar”, dijo Johnny Shapiro, director actual de la agrupación.
El académico comenta que en su gestión trata de emular el trabajo del precursor del grupo, el poeta y dramaturgo ecuatoriano José Martínez Queirolo.
“La finalidad es continuar con la educación complementaria a los politécnicos. En el teatro le brindamos al estudiante esa capacidad para vencer el pánico escénico, mejorar la dicción y vocalización”, añade.
Shapiro recalca que estas acciones influyen de manera positiva a los alumnos cuando estos se enfrenten a “la vida diaria, laboral o en las actividades que desarrollen en la institución como es el caso de las exposiciones”.
Este fue el caso de Nohelia Cheing (18), la joven a sus catorce años ingresó al grupo y todavía recuerda las veces que se escondía detrás de su hermana para no salir al escenario. “Era muy tímida y lloraba; pero ahora me gusta y las obras me han ayudado a crecer como persona”, manifiesta con una gran sonrisa.
Gloria Febres Cordero, directora de ‘Espol Cultural’, menciona que se está haciendo tradición que, en cada aniversario, se elabore un musical donde participen los demás jóvenes que pertenecen a las otras cinco agrupaciones culturales que cuenta el campus.
El año pasado hicieron un homenaje al músico e historiador guayaquileño Guido Garay, y en este año al compositor Carlos Aurelio Rubira Infante.
“Ha sido una plataforma de difusión y desarrollamos el proyecto Lunes Culturales, donde se da espacio a la literatura, religión y participa gente externa de la universidad”, precisa Febres Cordero.
En los próximos días, los jóvenes ensayarán la obra ‘El crucero de las locas’, propuesta donde todos los integrantes interpretarán personajes de su distinto género.
Se busca romper esa barrera de timidez para que se fortalezca la actividad académica.
SAMY MACÍAS integrante del grupo de teatro Espol