Participación: dos meses de una gestión desabrida
Seis resoluciones en dos meses dejó la presidencia de Tuárez ❚ El nuevo Consejo podría revisar lo actuado por los censurados
El “no nos dejan trabajar” fue tomado de forma literal. La mayoría que dominó el Consejo de Participación Ciudadana y Control Social (CPCCS), por 62 días, se va dejando cifras bajas de productividad, tanto en lo administrativo como en las funciones propias del organismo.
En este tiempo, el Consejo celebró ocho sesiones de pleno en las que la tónica fue la confrontación entre la mayoría conformada por el entonces presidente, Carlos Tuárez, la vicepresidenta, Rosa Chalá, y los consejeros Victoria Desintonio y Walter Gómez con la minoría encabezada por María Fernanda Rivadeneira, Sofía Almeida y Christian Cruz.
Esa pudo ser una de las razones para que en dos meses solo existan seis resoluciones aprobadas. Todas referidas al nombramiento de funcionarios como el secretario general del organismo y la propia nominación de Tuárez y Chalá como los principales directivos de este organismo.
La otra resolución que aprobaron, y a la postre fue la que les costó la censura y destitución en la Asamblea Nacional, el miércoles pasado, fue la creación de una comisión especializada para revisar el proceso administrativo para la conformación de la Corte Constitucional.
Esa no aparece en el sistema del CPCCS. Los exconsejeros decidieron retirar la moción de creación de esta instancia aunque la figura que debían aplicar es la reconsideración. Por eso, para el asambleísta Raúl Tello, que fue uno de los interpelantes en el juicio político contra Tuárez y los demás consejeros, esta resolución estaría vigente.
En la parte administrativa la actividad fue aún menor. En el sistema del Servicio de Contratación Pública (Sercop) no se refleja ningún tipo de proceso iniciado o ejecutado. La última factura que pagó el CPCCS tiene fecha de 12 de junio, un día antes que se posesionen, y corresponde a la gestión del Consejo transitorio.
La consejera Rivadeneira reconoció que durante este tiempo se pudo aprobar muy poco a nivel del pleno, aunque aseguró que su consejería hizo un trabajo interno que será propuesto a los nuevos integrantes del CPCCS.
Sin embargo, Almeida señaló que lo poco que pudieron aprobar los integrantes de la mayoría depuesta podría ser revisado una vez que asuman la titularidad los cuatro consejeros suplentes.
“Hay muchas actas que no han sido todavía aprobadas, también hay que tomar decisiones con respecto a eso. No olvidemos que las decisiones y el orden del día ya venían establecidos, no se invitó nunca a los consejeros de minoría a participar de eso”, dijo Almeida.
Tuárez siempre se justificó aduciendo que era víctima de una persecución desde la Asamblea, la Fiscalía y el Ministerio de Economía que no permitían el trabajo y cumplimiento de atribuciones.
Pese a esa supuesta persecución, la entidad logró gastar más de un millón de dólares en dos meses. (ver cuadro)