El río les salvó el día
Ciudadanos usaron lanchas, motos y los pies para trasladarse por el cierre del puente ❚ Ayer fue el segundo día del toque de queda
Era como remontarse a los ochenta. Cinco lanchas surcaban el río para transportar pasajeros desde Durán a Guayaquil o viceversa, la mañana de ayer. El bloqueo del Puente de la Unidad Nacional, que policías y militares llevaron a cabo desde las 07:00, alentó la incursión al servicio fluvial hasta el mediodía en el cantón.
El acceso a Durán, que lleva varios días sin transporte urbano, estuvo bloqueado por más de 200 militares, 150 policías, agentes de tránsito, de seguridad privada y 25 volquetas con piedras. Desde las 08:00, decenas de trabajadores de ese cantón se embarcaron en el río Babahoyo, cerca de los rieles del ferrocarril, para llegar a Guayaquil, a un costo de 2 o 3 dólares. Arribaban al malecón, por la calle Tomás Martínez.
Hasta las 10:30 llegaron cinco embarcaciones al puerto. En cada una viajaban en promedio 10 pasajeros, que fueron revisados por la policía a su arribo; pero aunque los agentes no encontraron irregularidades, a las 12:00 se cerró el acceso.
“Yo trabajo en Durán y tengo 40 minutos esperando una lancha. Los militares nos dicen que esperemos, pero creo que perderé el día de trabajo”, comentó Mercedes Beltrán, quien es secretaria. Las embarcaciones no volvieron a salir.
De forma paralela, enfrentamientos entre manifestantes y policías atemorizaban a los ciudadanos, y las motocicletas circulaban de manera irregular. Hasta las 14:00 no hubo paso. Después se abrieron los dos carriles del puente, a las 21:00.
Una vez que los agentes permitieron el acceso, motociclistas como Manuel Macías aprovecharon para ofrecer el servicio de traslado. Dijo que había cerca de 30 compañeros haciendo el recorrido de Durán hasta La Puntilla, a un precio de $ 1 por persona.
Los que no tenían dinero o simplemente preferían caminar debían pasar un minucioso registro policial y emprender una marcha de más de 20 minutos por el puente.
Guayaquil, en cambio, vivió su segunda noche de toque de queda, con el malecón cerrado, luego de su convulso encuentro de manifestaciones, y se quedó sin metrovía ni buses en horas de la tarde. Luego la ATM confirmó que algunas rutas estaban funcionando.