La revisión vehicular, con más ausentes de lo usual
Hasta octubre, 9.000 vehículos menos que en 2018 han cumplido el proceso ❚ El factor económico es un argumento ❚ La ATM prevé aglomeración al final
No solo no han llegado todos los vehículos que a esta fecha debían haber cumplido con la revisión; sino que, incluso, hay más ausentes que los que había el año pasado hasta este mismo periodo.
Carlos Orellana, director de Revisión Técnica Vehicular (RTV) de la ATM, indica que, hasta octubre del 2018, cumplieron con el proceso 204.770 automotores; mientras en igual periodo del 2019 hubo 195.738. Es decir, hay una diferencia negativa de 9.000. El parque automotor de Guayaquil está estimado en 250.000 vehículos.
En las cifras de este año están incluidas las unidades retenidas en operativos para obligar a los propietarios a que efectúen el proceso.
El funcionario señala que la escasa presencia de usuarios ha sido la tónica. Pese al poco tiempo que le resta al 2019, así lo evidencian los centros de revisión.
El jueves eran las 08:00 y solo tenía tarea la mitad de las 16 líneas de inspección del Centro de Revisión Técnica Vehicular-norte, de la avenida Benjamín Rosales. El panorama no varió hasta las 19:00, cuando finalizó la jornada.
Durante ese día, alrededor de 500 dueños de vehículos acudieron al proceso, aunque la Autoridad de Tránsito Municipal (ATM)
asegura que tiene capacidad para atender a unos 1.600 usuarios.
Lo mismo acontece en los centros Sur (avenida 25 de Julio) y Daule (kilómetro 10,5). Lo ideal es que entre ambos reciban en total mil usuarios por día. La realidad es que no llega ni la mitad.
Y eso que, según Orellana, el 50 % de los ciudadanos espera los últimos diez días del mes para cumplir con el proceso.
Alfredo Carrasco fue uno de los conductores que acudieron el jueves a la revisión. El último dígito de la placa de su camioneta es 3, o sea que debía haber ido en abril. El retraso le significó una multa de $ 50.
“Un problema familiar dificultó que contara con el dinero para el trámite”, dijo Carrasco mientras esperaba el turno.
El conductor Galo Vásquez también pagó la multa. Pero la justifica porque con la eliminación del impuesto verde se ahorró al menos la mitad de lo que pagaba hasta el año pasado por la revisión de su auto.
A más del factor económico, Orellana puntualiza que otro motivo de las cifras bajas es que ciertos usuarios insisten en llevar sus vehículos a centros que están fuera de Guayaquil, donde la revisión solo es visual.