La prefecta de Pichincha, Paola Pabón, no pudo salir en libertad con un recurso de habeas corpus
La audiencia se cumplió ayer en la Corte de Justicia de Pichincha
La lluvia que cayó ayer en varios sectores de la capital no impidió que simpatizantes de Paola Pabón, prefecta de Pichincha, acudan a los exteriores de la Corte de Pichincha.
Portaban carteles, pancartas, tambores y se guarecían de la lluvia debajo de paraguas y ponchos plásticos.
Ayer, Pabón se presentó en la Corte para una audiencia de habeas corpus con la cual buscó recuperar la libertad perdida el 14 de octubre, cuando recibió una orden de prisión en una investigación por rebelión. La Corte le negó esa posibilidad.
Ella fue detenida junto con dos personas más. Su defensor Ramiro Aguilar ha insistido en que no existen pruebas en su contra. Dijo que no se le han encontrado armas y que la Fiscalía se sustenta en chats de Whatsapp. Pabón, por su parte, aseguró que se le judicializa por dos tuits.
Pero la Fiscalía investiga el presunto delito contemplado en el numeral 4 del artículo 336 del Código Orgánico Integral Penal (COIP). Ese apartado sanciona a quien promueva, ayude o sostenga cualquier movimiento armado para alterar la paz del Estado con una pena privativa de libertad de siete a diez años de cárcel. Pabón ingresó a la diligencia junto con su abogado. Por tratarse de un delito contra la estructura del Estado, la diligencia se hizo en forma reservada.
El exasambleísta correísta, Virgilio Hernández, también fue vinculado al expediente. La Fiscalía cuenta con interceptaciones telefónicas que apuntarían a su participación en el ilícito. Pero él ha negado cualquier clase de sospecha.