Víctima de un secuestro logró “milagroso” escape
El portamaletas donde llevaban cautivo a taxista se abrió por error y este aprovechó ❚ Su familia cree que pudieron matarlo
Recién ayer, miércoles, los padres de Darío Javier Suárez Suárez se enteraron de que el día anterior, este había logrado escapar de sus secuestradores, quienes lo maniataron y metieron en la cajuela del carro. Ahora creen que su hijo vive “de milagro”.
“Ellos (los padres) son de la tercera edad y están enfermos, tuvimos que decirles lo ocurrido porque a cada instante preguntaban por mi ñaño”, dijo Miriam Suárez, hermana de Darío, asaltado el martes desde las 07:00 hasta el mediodía.
“Quizás iban a matarlo. Gracias a mi Dios se salvó. Cuando nos enteramos por las redes sociales, lloramos al ver en el vídeo cómo él luchó contra esos pillos que querían volver a meterlo en el portamaletas”, acotó Miriam. “Agradecemos a la gente de Posorja por su ayuda”.
Darío Suárez había salido de casa, muy temprano, en el auto Aveo color verde de propiedad de su padre y se había dirigido hacia el puerto de Anconcito, donde trabaja haciendo fletes a los pescadores. Como esa actividad la realiza durante todo el día, sus parientes no sospechaban que le ocurría algo malo.
Pero en la tarde, a través de sus vecinos se enteraron de lo que le había ocurrido al conductor. “Dicen que a Darío lo han raptado, pero alcanzó a escaparse en Posorja. Él está bien”, informaron a la familia.
En efecto, un video que se viralizó ayer muestra la forma en que la víctima se liberó. Al llegar secuestradores y secuestrado a una gasolinera de Posorja
para abastecerse de combustible, los delincuentes habrían accionado por error el mecanismo que quita el seguro al portamaletas. Esto fue aprovechado por el cautivo, quien rápidamente intentó salir del carro. Uno de los hampones se dio cuenta y empezó a forcejear con Suárez para impedírselo.
La determinación del cautivo pudo más y logró salir y alejarse, ante la mirada de los hampones, quienes se resignaron y huyeron del lugar.
Ignacio Arreaga, cuñado del secuestrado, comentó que fueron cuatro los maleantes que contrataron el auto de Suárez para que los lleve hasta la terminal terrestre Sumpa, en el cantón Santa Elena, pero en el trayecto le pidieron que avance hasta el ingreso a Chanduy. Una vez que llegaron a la vía Santa Elena-guayaquil, lo asaltaron y lo metieron en la cajuela de su mismo automotor.
En el puerto de Anconcito, algunos habitantes consultados aseguraron haber visto a dos de los sospechosos del secuestro exprés, hoy detenidos.
Estos usaban botas y llevaban sus ropas mojadas, igual que los pescadores cuando arriban a la playa. “Decían que habían sufrido un percance y andaban vendiendo un equipo GPS y un equipo de agua”, comentó Arreaga.
Margarita Suárez, tía de Darío, cree que este “se confió” porque los ladrones parecían pescadores y por eso accedió a a llevarlos en su auto. No obstante, ella considera que el hecho de que su pariente haya escapado es un milagro.
Los familiares de esta nueva víctima del hampa pidieron a las autoridades que investiguen a los detenidos “y que les caiga todo el peso de la ley”.