Un río desbordado arrasa un caserío en Colombia
Inusuales lluvias provocan el torrente. Unas 50 familias están afectadas
Las fuertes lluvias que caen en estos días en la zonal central de Colombia provocaron el desbordamiento de un río que terminó por arrasar la madrugada del jueves con un caserío rural dejando un saldo parcial de ocho personas desaparecidas.
Luego de varias horas de labores de rescate, la estatal Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) indicó en un comunicado que, además de los desaparecidos, 16 familias fueron afectadas por el torrente de agua, piedras y troncos que destruyó tres viviendas en el municipio de Chaparral, en el departamento de Tolima.
“La quebrada que denominamos El Mono se desbordó al punto de que llegó al caserío La Virginia, arrasando con el puesto de salud, la iglesia, el polideportivo, población y viviendas”, señaló más temprano el alcalde del municipio, Humberto Buenaventura.
La tragedia ocurrió a las 3 de la mañana, cuando dormían las 100 familias campesinas e indígenas de esa zona del cañón de las Hermosas, que está a más de 3 horas en carro de la zona urbana de Chaparral.
“El agua se llevó todo, la casa y hasta a mi familia”, afirmó Aura María Aponte, quien había viajado desde Fusagasugá, Cundinamarca, para compartir con su familia en estos días de Navidad. Era la primera vez que visitaba la zona.
Las fuertes lluvias provocaron un represamiento de materiales que generó el desbordamiento del río, convirtiendo la corriente en una avenida torrencial que acarreó a piedras y árboles en su camino.
La fuerza pública y los bomberos llegaron al lugar para apoyar las labores de rescate, mientras que la gobernación de Tolima brindó alojamiento temporal a los damnificados. Al caer la noche seguía la búsqueda de desaparecidos.
La segunda temporada de lluvias -que afectó a unas 39.000 personas, según la UNGRD- terminó el 15 de diciembre, por lo que las precipitaciones del jueves son consideradas inusuales.
EL DETALLE
Unas 50 familias. Esa es la cifra de los afectados por la corrida. El caserío está poblado por 100 familias. La Fuerza Aérea y el Ejército prestan ayuda.