Barcelona se queda sin vicepresidente
GUAYAQUIL ■ El directorio de Barcelona parece debilitarse cada vez más. Ahora fue el turno de Ramón Barredo, quien fue designado como vicepresidente administrativo del club, de presentar su “renuncia irrevocable” a la dirigencia que comanda Carlos Alfaro Moreno.
Mediante una carta al presidente, Barredo da a conocer que su salida se debe al incumplimiento del plan de trabajo realizado antes de las elecciones, lo que motivó que días atrás den un paso al costado otros ocho dirigentes.
“En varias ocasiones he hablado con usted intentando que se retome el rumbo que habíamos trazado desde la primera reunión que tuvimos en aquellos días de septiembre”, detalla la misiva.
Agrega que “con el transcurrir del tiempo, pienso que mi gran error posiblemente fue no haber aceptado la presidencia cuando en su momento me la propusieron pensando que esta unión, presidiendo usted a este grupo, podría haber sacado a nuestro equipo de la tremenda crisis financiera e institucional por la que atraviesa”.
Barredo califica como “dolorosa” a su decisión de renunciar a la vicepresidencia y contó que “el grupo de Alfaro” lo ha excluido de varias reuniones y decisiones que se han estado tomando.
“Supuestamente yo era parte de la Comisión Deportiva del club y no me han citado a ninguna reunión. No se están respetando las ideas del proyecto que le ofrecimos a los socios que nos eligieron. El grupo de Alejandro (Alfaro Moreno) no nos toma en cuenta para nada”, manifestó.
Barredo se une a Esteban Noboa, Xavier Santos, José Luis Carrión, Jaime Gonzenbach, Carlos Bernitt, Ricardo Gómez, Héctor Sanabria y Efrén Vélez, quienes hace unos días solicitaron su salida del Ídolo.
Pese a las diferencias con Alfaro Moreno, el grupo que dejó el directorio ha manifestado que le desea éxitos al equipo torero en la temporada.
Por su parte, el presidente amarillo señaló anteriormente que “estoy triste, golpeado porque no es normal la salida de directivos como ha sucedido” y negó que las bajas en la directiva estén motivadas por “diferencias por cuestiones políticas”.